El día martes 8 de octubre se cumple medio siglo de la publicación del Decreto en el Diario Oficial de la Federación que mandataba el cambio político y legal de los territorios federales de Baja California Sur y de Quintana Roo, que dejaban atrás esa categoría y se convertían en entidades federativas.
Aquel año de 1974 declarado en ese entonces Año de la República Federal y del Senado, por los 150 años de la promulgación de la Constitución de 1824 y la constitución del primer Estado Mexicano, concluía con la conclusión de un largo periodo en el que durante décadas a lo largo del siglo pasado, mujeres y hombres de la media península lucharon con la Ley en la mano por la autodeterminación del pueblo sudcaliforniano.
Gobernantes civiles, nativos y con arraigo era la exigencia de los grupos regionales al gobierno central que no tomaba mucho en cuenta las demandas del pueblo de Baja California Sur, y por espacio de medio siglo, desde 1924, los procesos democráticos se fueron apagando poco a poco en el Territorio. Las decisiones no se tomaban en La Paz, se tomaban en la capital del país.
Al materializarse el cambio, atrás quedaban el FUS en sus dos épocas, el Movimiento Loreto 70, la reinstalación de los municipios en 1971, y la construcción de la carretera transpeninsular 1970-1973, como aspectos relevantes precursores del proceso de cambio que se vivió en el entonces Territorio entre octubre de 1974 y abril de 1975.
En octubre de 1974 la sociedad sudcaliforniana empieza a evolucionar en lo social, económico y político, que le ha permitido a 50 años de distancia ser una sociedad más plural, más participativa, incluyente, inserta en un mundo globalizado que obliga a ser más competitiva en muchos sectores de las actividades económicas y sociales.
En estos 50 años, pero sobre todo a partir de 1999 se han presentado alternancias políticas en las principales fuerzas políticas con presencia en el país han gobernado en la entidad, el Congreso y los ayuntamientos; escasos han sido los conflictos postelectorales, y hoy se cuenta con esquemas de representación política con igualdad de género, así como una normatividad electoral totalmente incluyente para los denominados grupos vulnerables.
En este medio siglo nuestro Estado vivió las crisis económicas de 1976, 1982, 1987 y 1995, que modificaron el patrón de desarrollo económico sustentado en el comercio de importaciones, recordemos el precio del dólar de 12.50 que cambió el 31 de agosto de 1976, y las inflaciones anuales de 100 por ciento en la década de los años 80.
El comercio de importaciones como modelo de desarrollo se terminó y debimos como entidad encaminarnos al turismo, que hoy con los más de 4 millones de visitantes anuales nos convierten en una potencia turística en el entorno nacional e internacional, con el municipio de Los Cabos a la cabeza.
Hoy muchos mexicanos, muchos extranjeros residen en Baja California Sur, vienen atraídos por la tranquilidad, la calidad de vida y las expectativas de empleo, la confluencia en los cinco municipios de personas de todo el mundo, de todos los estados del país nos convierten en una sociedad con una gran riqueza cultural que como todo proceso social permanentemente está construyendo los rasgos de una nueva identidad.
Indudablemente un elemento distintivo que transformó a la sociedad sudcaliforniana fue la Universidad Autónoma de Baja California Sur, nacida por Decreto del Congreso del Estado un 31 de diciembre de 1975, y en la que miles y miles nos hemos formado en sus aulas, y que es un hecho que ha aportado para esta evolución sudcaliforniana.
Son muchos los elementos que en este tiempo surgen para la reflexión sobe lo que hemos sido y lo que queremos ser, pasando por lo que actualmente somos.
Es necesario con el pretexto del medio siglo de vida como entidad federativa hacer un alto muy pequeño para dimensionar por dónde nos vamos a ir como sociedad los otros 50 años.