El excelentísimo embajador de China en México, Qiu Xiaoqi con el distintivo de una bufanda roja, abrió el recinto diplomático para mostrar su cultura como parte de su tradición milenaria en el marco de la Fiesta de Primavera 2019, que por séptimo año consecutivo, se realiza en tierra azteca.
Se le dio la bienvenida al reinado del Año del Cerdo como dicta su calendario asiático-oriental simbolizando la suerte, salud y éxito que fueron sus deseos en las relaciones chino-mexicanas y con el augurio de un mañana más brillante.
Ante la presencia de personalidades de la política y de seguridad nacional en el jardín de la diplomacia, se conmemoró a la vez el Día de la Cultura China que por siete décadas se ha expandido en el Mundo, como anfitrión, el embajador Qiu Xiaoqi y su esposa Liu Min; dio la bienvenida al presidente de la mesa directiva del Senado, Martí Batres, a la secretaria de Economía, Graciela Márquez.
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También al subsecretario de Defensa Nacional, Dagoberto Espinosa, al almirante y comandante de cuartel general de Secretaría de Marina, Mario Carbajal, al subsecretario de Turismo, Humberto Hernández y funcionarios mexicanos como del cuerpo diplomático chino y de otras nacionalidades.
Qiu Xiaoq como parte de su mensaje que brindó durante la jornada exhibiendo la danza ancestral del dragón y león, como de la actividad de caligrafía con los caracteres en el idioma chino-mandarín que unos significaban felicidad, fortuna y esperanza, cuyo trabajo lo hizo el diplomático a la vista de todos, y se los regalo uno a uno, a los invitados especiales para colocarlos en las entradas de su casa, informó: “Desde 2013 el intercambio cultural con México es una muestra de la entrañable amistad, en donde acercamos a nuestros amigos mexicanos a un mayor conocimiento sobre China. Juntos celebramos esta fiesta y rememoremos la amistad entre nuestros dos pueblos.