La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- Desde la altitud de Sorrento, en Ilalia se reconoce a lo lejos Capri, pura sensualidad en paisaje y terreno descubierta por emperador Romano Tiberio 842-37 A.C, quién se instaló ahí en la Villa Jovis desde donde partimos viendo sus ruinas en Monte Tiberio al contraste con el mar.
Sitio en el que te sientes feliz por la luz que irradia su Arco de piedra, el del amor a sobre el mar.
Mas las ultimas noticias me indican que hay depredación brutal en su mar, una mala señal, de aumento del crimen y falta de buen juicio y equidad.
Capri esta en semáforo amarillo, entonces vamos a recorrerlo en estas letras.
Esta Isla está situada en el mar Tirreno a una altitud con 10.3 km cuadrados de superficie.
Erguida Sobre el flanco sur del Golfo de Nápoles.
Pablo Neruda escribió durante su exilio de un año en esta isla divina:
“La Isla tiene dos caras bien bruñidas y delineadas …”
Será por el carácter de sus habitantes, dulces, y eso sí, muy elegantes.
La primavera de Capri se transforma rabiosamente en verano, como en Los Cabos, será por el cambio climático, aún así es un sitio que posee rebosante felicidad para los turistas y clubs privados que dicen son de perdición…un encuentro con el diablo tentador.
Afortunadamente aun queda una playa publica.
Existe otra cara de Capri: El rostro de la gente local y trabajadora quienes proveen de tantos placeres a los visitantes con su buen ánimo, pesca fresca y delicias de la tierra y la gastronomía pura y local. Orgánica.
Vamos…
A encontrarnos con las alturas de los acantilados en Ana Capri, comuna ubicada en las colinas de la ciudad que se tiñen de color índigo al atardecer.
La naturaleza en toda su plenitud se observa en sus flores, buganvilias, gramillas y yerbajos en circunferencia del Mar Mediterráneo.
Capri, desde la década de los cincuenta adquirió fama de atraer al turismo del de Jet Set Internacional como la social Jackie Kennedy y estrellas de cine como Audrey Hepbrun, quién por cierto puso de moda los pantalones que usan los pescadores y llaman pesqueros, a los que ella les llamó Capri, y con estás temperaturas pronto podremos usar.
Dicen que la Isla de Capri ha sido sitio de descanso incluso de soviéticos como Lennin (que según era muy austero… hipócrita) Reinas, y Reyes.
Imperdible es hacer unas fotos en el mirador Italiano “El Belvedere” de Tragara, y los Faraglioni en Anacapri.
De esta Isla el poeta Virgilio escribió en la Eneida del siglo I a.C.
Y afirmo que la Isla había sido poblada por los griegos, razón de más de que sean bellos.
A saber, que el renacimiento de Capri fue en el siglo XIX y hasta hoy, fue gracias a la interesante ruta Gruta Azul o ruta de Gradóla.
Un área de difícil acceso al depender del carácter del mar y la marea
a donde -si accedes- habrá una luz de color azul horizonte que nos da un significado:
Poesía y Sensualidad en el Golfo de Nápoles que se puede apreciar desde la Piazzeta o en la Cartuja donde los monjes crean delicias perfectas.