La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- La era tecnológica nos ha facilitado muchas cosas, lo imposible se volvió posible y en ocasiones se reducen las expectativas, puesto que la frialdad de la red y la facilidad para conseguir las cosas reduce el nivel de asombro, sobre todo en la música que en la actualidad donde ya es un archivo más que se introduce a una USB la cual la ponen en el carro, en bocinas o la llevan a cualquier lugar hasta en el bolsillo y ni hablar de Spotify, pues si no tienes cuenta no estás en onda.
Las nuevas generaciones no tuvieron esa oportunidad de valorar el trabajo que hay detrás de la música puesto que antes se tenían que hacer largas filas para poder comprarla y lo popular en los años 80´s y 90´s eran los famosos y descontinuados cassettes de música que creó el ingeniero holandés Lou Ottens en la década de los años 60´s siendo a finales del año de 1962 cuando se lanza al mercado siendo un boom para todos pues dos carretes en miniatura con cinta magnética ataviada con una cajita de plástico que los cubrió y teniendo su lado A y B tenían acaparado a un exigente público pues la música estaba en las manos de todos.
LOS JÓVENES DE LA EPOCA MANIOBRABAN PARA REGRESAR LA CINTA
Se dice y se cuenta que los más difícil para los jóvenes de la época era regresar las canciones pues muchos le introducían los dedos para maniobrar el artefacto y otros la regresaban con un lápiz o una pluma. La llegada dl disco compacto fue el primer tropiezo que comenzó a descender la vitalidad que tenían los cassettes en la década de los años 80¨s viviendo su descalabro y desaparición a principios del año 2000.
Hoy en día los cassettes son un tesoro y suelen tener precios exorbitantes dependiendo del artista y del año que se lanzó y ni hablar de las ediciones especiales que se lanzaban. Muchas y muchos jóvenes no conocen si quiera que es un cassette ni mucho menos en donde se escuchaba, pero sus padres y sus abuelos les cuentan un sinfín de historias que evocan a lo que es considerada la mejor época de la música puesto quienes lo vivieron nunca podrán olvidarlo pues sonaban por lo lato los reproductores de música o los famosos reproductores de cassette portátiles.
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Así que si hay cintas de música en tu casa tal vez tengan tesoros musicales que otras personas anhelan, pues en los grupos de compra y venta de música son consideradas obras invaluables que conforman la cultura popular que nunca morirá y siempre estará presente en la historia musical que representó a una generación de artistas que cambiaron la visión de México y el mundo entero y que gracias a ello la apertura es infinita.