Las ventas de tortas y burritos en su local se han caído poco más del 50 por ciento, ya que antes de la pandemia había más consumo, además de la gente esta económicamente gastada y de vender 30 a 40 tortas hoy en día solo vende 10 a 15 piezas, tiene poco de mes y medio que reabrió su negocio, pues no desea que sus clientes se olviden de sus productos y su sazón que le ha dado un nombre entre los comerciantes.
Suscríbete aquí a la edición digital de El Sudcaliforniano
Don Jorge se levanta antes de las 5 de la mañana para realizar la comida que vende día a día y el proceso es minucioso pues la limpieza es esencial, además que los ingredientes que utiliza son de la mejor calidad. Durante los meses de confinamiento don Jorge se dedico a la venta de chorizo y machaca productos que él mismo realizaba en su casa y salía a venderlos a las afueras de los supermercados, ya que nuca le ha tenido miedo al trabajo, al contrario era tiempo de ponerse creativo para poder seguir generando dinero en época de crisis ante el Covid-19.
Don Jorge también hace hincapié que muchas veces las ganancias de sus ventas se le van en comprar el gel antibacterial que es lo más caro, ya que este producto lo tiene que comprar en grandes cantidades para que le rinda de 10 a 15 días, por lo que pide al gobierno que sería buena idea apoyar a los comerciantes con gel antibacterial aunque sea una vez, ya que ayudaría muchísimo en la economía de la gran mayoría de ellos.
Don Jorge trabajo más de 13 años en la antigua terminal, pero cuando todo se cambio a la zona del malecón de la ciudad capital decidió cambiar de aires y emprender de nuevo en la terminal que está ubicada en Forjadores donde tiene más de 14 años ofreciendo a todos los clientes sus tortas y burritos.
Antes de la pandemia se dedico un buen tiempo a vender tacos de carne asada, pero ya es algo que descartó, pues lo más práctico es lo que le ha estado funcionando en esta nueva normalidad. Don Jorge manda un mensaje a toda la ciudadanía que es el que sigan apoyando el comercio local, pues de él dependen muchas familias sudcalifornianas que se quedaron sin trabajo y están buscando salir adelante, además de que el comercio local ofrece calidad en sus productos, amabilidad y sobre todo entrega, pues estos son los momentos donde las personas se están uniendo más que nunca.
