La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- El señor Edgar Alberto Olivares Álvarez, tiene 14 años dedicándose a la elaboración de algunas artesanías como aretes, pulseras, collares y demás. Tiene 10 años trabajando en el Callejón Cabezud, vendiendo artesanías elaboradas por el mismo, todo hecho a mano: “Todo es mi trabajo, las técnicas son diferentes, es macramé, es el tejido, material del metal que es filigrana, y otras técnicas.”
En su familia es el único que se dedica a este tipo de negocio de artesanías: “Me enseño un muchacho que se dedicaba a este oficio, una vez en una fiesta de San José del Cabo, un muchacho que es peruano, ya radicado en la Ciudad de México, le hice el comentario que yo quería aprender y me empezó a enseñar, me motivó a hacer las cosas, de ahí en adelante eso ya tiene 14 años que me dedico a esto.”
En las ventas señaló que tienen sus altas y sus bajas, el turismo es el que los favorece. A veces es poco el turismo que pasa por el callejón, a veces no hay gente, en realidad hay muy poca compra de parte de la gente local. Los que más le compran son los turistas.
Los precios varían desde $50 pesos, hasta piezas de $1500 pesos, con trabajos más grandes o de mayor elaboración: “Me tardo unas 6 o 7 horas en hacer estos trabajos, obviamente con el material, si es ámbar, piedras semipreciosas, dependiendo mucho del tipo de trabajo y de las piedras que utilice.”
Las tortuguitas se las traen de Puebla, son de ónix y mármol de reventa: “Tengo materiales que es acero inoxidable martillado, tengo alpaca, coral negro, jade, trabajos hechos en plata, la plata la ha estado fundiendo de cosas que le quedaron, las mando fundir y se las hicieron alambre, de ahí saca la cadena los engarces.”
Los aretes tienen un precio desde $100 pesos, los trabajos más costosos son de $400 pesos, “Más que nada es por el valor de la piedra, o la complejidad del trabajo, pero trato de hacer lo más accesible que se pueda, para que también se motive y se anime la gente por comprar las piezas.”
“Tengo cuarzos, ágatas, obsidiana, jade, piedras fósil, ahorita estoy trabajando con un muchacho que me está consiguiendo concha de choro, lapa, vertebra de pescado, todos esos trabajos ya los hago d otra forma para que la gente vea otra perspectiva, de artículos de uso cotidiano, porque muchas veces regalan el llaverito de la concha y todo, pero van a dar a una vitrina, y yo no, yo hago accesorios para que los sigan usando en cualquier época del año y en cualquier ciudad.”
También hace pipas pequeñas de ónix, o de mármol, unos solecitos de acero inoxidable, el tejido es el lino encerado, con unos granates, pulseras, los collares varían en estilos, todas las piedras que maneja son piedras naturales.
Hace dos meses les hicieron una modificación donde el Ayuntamiento les otorga el espacio para poder trabajar: “Aquí estamos nosotros, empezamos a trabajar desde el suelo, ponemos la manta en el suelo, no teníamos luz, y donde quiera nos acomodábamos, pero el Ayuntamiento poco a poco nos ha ido regulando, hasta que ahora voltearon la cara hacia nosotros y nos hicieron el gran favor de adecuarnos el espacio para trabajar, nos están cobrando el mismo impuesto semanal que es de $195 pesos a la semana, no nos han dicho si va a haber algún incremento, y a partir de que empezamos a trabajar en este lugar se ha ido manejando la misma tarifa.”