La Paz, Baja California Sur.- En una era marcada por el avance tecnológico, la tarea de fomentar la lectura entre los más jóvenes presenta desafíos particulares.

Yolanda Tafoya, promotora cultural y mediadora de lectura con tres décadas de experiencia, resaltó la relevancia de que los padres dediquen tiempo a leer cuentos a sus hijos, no solo por el valor educativo, sino también por el fortalecimiento de los lazos familiares. Sin embargo, señala que, en la actualidad, los padres enfrentan limitaciones de tiempo debido a sus responsabilidades educativas y económicas.

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“Es importante que los padres dediquen tiempo a leer cuentos a sus hijos, no solo por el valor educativo, sino también por el fortalecimiento de los lazos familiares. "Son momentos que van a recordar por siempre, que van a fortalecer esos lazos familiares, ese amor, ese entorno armónico", afirma Yolanda.

En relación al uso de tecnologías y su impacto en la promoción de la lectura, Yolanda Tafoya destacó que, a pesar de que su trabajo se lleva a cabo principalmente de manera presencial, no se tiene alguna resistencia hacia las tecnologías. No obstante, aseguró que la auténtica magia se desencadena cuando los padres se involucran de manera activa en las actividades de lectura y se apartan gradualmente de la dependencia de los dispositivos electrónicos.

Recordó que la pandemia llevó a muchos mediadores de lectura a recurrir a las redes sociales para llegar a un público más amplio; sin embargo, reconoce que la interacción directa con los niños durante las sesiones de lectura presenciales es insustituible.

“La auténtica conexión y el encanto especial surgen en el contacto directo con los niños durante las sesiones presenciales, donde puede ver sus sonrisas y ojos maravillados”.

En cuanto al uso de audiolibros, mencionó que es una actividad más adecuada para jóvenes y adolescentes, ya que los niños más pequeños pueden distraerse fácilmente. Insiste en la importancia del contacto directo durante la lectura para generar la magia y la conexión emocional entre padres e hijos.

Para Yolanda, la esencia de la magia se encuentra en el contacto directo, en la calidez que se transmite cuando un padre o una madre comparten la experiencia de la lectura, permitiendo a los niños imaginar historias y emprender viajes maravillosos a través de las palabras escritas.

Asimismo la importancia de compartir momentos de lectura con los hijos, especialmente antes de dormir, adquiere un significado especial según Yolanda Tafoya, debido a que las noches ofrecen un efecto muy especial, marcando un momento de tranquilidad y relajación después de un día lleno de actividades.

Explicó que este es un tiempo en el que los padres tienen contacto exclusivo con sus hijos, brindándoles una sensación de seguridad y calma por lo que , este vínculo fortalece los lazos familiares, contribuyendo a que los niños sean más seguros, empáticos y resilientes.

CUENTIRICUENTOS

La historia de Cuentiricuentos se remonta a más de tres décadas atrás, cuando Yolanda Tafoya inició su carrera en el servicio público, asumiendo la responsabilidad del programa de fomento al hábito de la lectura en la biblioteca pública Leopoldo Ramos Cota.

“En esa época, logramos posicionar la biblioteca en el segundo lugar a nivel nacional por sus actividades de fomento a la lectura, que incluían talleres con niños, jóvenes y adultos, así como charlas y conferencias”, recordó.

Cuentiricuentos surgió de la fusión de cuentos y títeres, una idea que se gestó durante la realización de actividades fuera de las bibliotecas, cuando Yolanda y su equipo llevaban la magia de las historias a las calles.

“Esta experiencia se amplió al ámbito televisivo como productora y realizadora del programa infantil Amigocho, el primer programa infantil televisivo en el estado”.

Yolanda compartió que su amor por la narración de historias se originó en los relatos de su abuela paterna sobre la Revolución y personajes emblemáticos de su pueblo natal, Numarán, en Michoacán. Desde entonces, su dedicación a compartir cuentos e inculcar el amor por la lectura se ha mantenido constante.

A lo largo de su carrera, Yolanda ha trabajado en diversas áreas, desde la producción de programas infantiles hasta la coordinación de secciones culturales en noticieros. Su labor la llevó a recorrer todo el estado con el programa "Valor Sudcaliforniano" y a trabajar con niños en islas, cierres y albergues escolares, dejando un impacto positivo con un equipo comprometido.

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Después de varias experiencias en diferentes áreas, Yolanda regresó a la biblioteca Leopoldo Ramos Cota, donde se desempeñó como responsable de la ludoteca, continuando con sus actividades para niños.

“A lo largo de los años, trabajé con diversas audiencias, desde jóvenes y adolescentes hasta personas en reclusión y adultos mayores, pero la labor infantil siempre ha sido la que me ha brindado las mayores satisfacciones emocionales”.

Finalmente, expresó que la sala de lectura Cuentacuentos no solo es un espacio, sino un proyecto que ha evolucionado a lo largo del tiempo, llevando su pasión por la lectura y las historias a generaciones de niños y jóvenes en Baja California Sur.