Grupo voluntario lleva 10 años rescatando lobos marinos de BCS

En 10 años ha logrado desenmallar a 65 ejemplares en el Golfo de California

Raymundo León / El Sudcaliforniano

  · miércoles 27 de marzo de 2024

Gran parte de los enmalles es por las llamadas redes fantasma de la industria pesquera. Foto: Cortesía / Facebook Rescate de Lobos Marinos

La Paz, Baja California Sur.- Las poblaciones de lobos marinos ha caído un 65% en los últimos 35 años en el Golfo de California, señalaron integrantes de la organización “Rescate de Lobos Marinos”.

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La cineasta Eréndira Valle Padilla y la doctora Daniela Bárcenas precisaron que la única lobera protegida es la de Isla Espíritu Santo, en Baja California Sur, donde se estabilizaron los números y actualmente se encuentran al alza, de acuerdo con los monitoreos que realizan en las colonias de lobos marinos.

Expresaron que la reducción de las poblaciones de estos animales se debe a muchos factores, entre ellos el enmallamiento en redes “fantasmas” y basura que ensucia el mar.

La organización “Rescate de Lobos Marinos” brinda su apoyo en distintas loberas de BCS. Foto ilustrativa: Cortesía / Facebook Rescate de Lobos Marinos

Mencionan que su proyecto de rescate de lobos marinos en el Golfo de California nació hace 10 años por la necesidad de apoyar a las autoridades como Conanp, Profepa, Semarnat y Semar en el desenmalle de este tipo de animales, que requiere una metodología y personal especializado.

Explicaron que el desenmalle puede ser fácil o complejo dependiendo de la red o el objeto que trae enredado o atorado el lobo marino, si tiene o no corte en la piel y el músculo, y que tan grave y profunda es la herida, porque esto último puede complicar la recepción de la anestesia que recibe el animal en el momento que es intervenido para retirar los objetos de su cuerpo.

Comentó que los enmalles de lobos marinos y otros animales se puede dar en cualquier parte donde haya pesquerías, aclarando que su labor no tiene fines de lucro y está regulada por la Norma Oficial Mexicana 059.

Comentaron que su trabajo lo realizan en las loberas de la Isla Espíritu Santo, San Rafaelito, San Jorge y Puerto Peñasco en el Golfo de California, para lo cual aplican una metodología desarrollada a lo largo de dos décadas.

“Como parte de la metodología hacemos monitoreo, fotoidentificación de animales auxiliados, y clasificación de lobos”, puntualizaron.

Precisaron que la tasa de enmalle es mayor de lo que se tenía pensada, por lo que han llegado a contar entre 40 y 50 lobos enmallados en la Isla San Jorge, donde se practica la pesca industrial y artesanal y hay mucha red fantasma.

Explicaron que uno de los problemas es que cuando la pesca industrial barre con sus redes el fondo del mar, saca otras redes y todo tipo de basura, que la vuelve a arrojar al mar, quedando a la deriva o en las colonias de lobos marinos, donde los objetos pueden enredarse, encajarse o atorarse en el cuerpo de los animales.

Recordó que su primer desenmalle de lobos marinos en el Golfo de California lo realizaron el 10 de diciembre del 2015 con una hembra a la que llamaron Calafia; desde entonces a la fecha llevan 61 lobos marinos rescatados, aclarando que el proceso de desenmalle se lleva su tiempo no solo porque la tarea requiere destreza y cuidado, sino además una serie de gestiones ante las autoridades ambientales porque se trata de una especie protegida por la NOM059.

Las activistas expresaron que viven de financiamientos propios y donativos deducibles de impuestos, precisando que se trata de una labor costosa para un equipo conformado por siete personas.

Los lobos marinos son la especie que más recursos deja al estado, pero además tiene una gran importancia biológica y ecológica, es la especie centinela del mar, si los lobos están saludables, los ecosistemas también, indicaron.

Abundaron que el enmallamiento de lobos marinos y otras especies es impreciso, no hay muchos datos y es un tema al que las autoridades no le han puesto mucha atención.

Puntualizaron que hay que mejorar las políticas públicas porque, a pesar del daño que hacen las redes a la deriva, está prohibido recogerlas porque son un bien privado.

“Si un pescador ve un lobo enmallado debe llamar a la Profepa o la Conanp para que le quiten las redes, por eso exhortamos a los nuevos gobiernos a mejorar la ley porque se está mermando la biodiversidad marina”, advirtieron.

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“Los lobos enmallados son la punta del iceberg, de todo el problema de los mares; el mar es un cementerio de redes fantasmas que matan lobos, aves, tiburones, mantarrayas”, señalaron.