La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- Son miles las historias que rodean al místico Panteón de los San Juanes en La Paz Baja California Sur que se inauguró en el año de 1894, tiene este nombre ya que las primeras personas que fueron enterrados en el lugar se llamaban Juan y Juana.
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Hoy en día se encuentra en su máxima capacidad y es de gran tradición para los sudcalifornianos acudir a él ya que se encuentran los restos de sus seres amados, esos que en vida hicieron tan felices a muchas familias y que son inolvidables y a la vez inmortales, por otro lado existe la soledad, pues hay muchas tumbas olvidadas, esas que el paso del tiempo ha borrado nombres en sus cruces y que el polvo del día a día tapa como si fuera un manto donde yacen los recuerdos donde duermen esos muertos.
Eso si entrar a el Panteón de Los San Juanes es una gran experiencia y como dicen por la puerta grande hay tumbas y capillas de todos los tamaños y colores y de flores ni hablar tanto natural como artificiales, claro sin olvidar la estética pues para muchos lucen mejor y no se secan ( en apariencia pues se pueden observar cuartadas por el sol), un lugar que no conoce de clases sociales pues tanto llora el pobre como el rico y con la mirada comparten el dolor de haber perdido a un ser querido, sin palabras solo un movimiento de cabeza puede decir tantas cosas.
Nunca falta el niño, joven o adulto que desea ayudar con la limpieza de las tumbas, eso sí por una retribución monetaria. Los fines de semana se vuelven una fiesta desde muy tempranas horas, el estacionamiento del panteón comienza a tomar vida, vendedores de flores, de comida, de ropa y con la famosa frase “parece un carnaval” pues el vaivén de las personas en inevitable. Al caer la noche se puede observar la serenidad y solo la luna, los gatos y los perros son testigos de lo que sucede ahí dentro, así como la mujer que entra antes de cerrar y que nunca aparece, eso sí tiene a los taxistas esperando su salida para recibir el pago.
LEYENDA DE LA DAMA DE PANTEÓN
En los años 80´s y 90´s era muy popular una leyenda que contaban los taxistas de la ciudad quienes expresaban haber llevado a un dama muy bella que traía consigo un enorme ramo de flores quien en su trayecto les contaba a los amables conductores que eran para su esposo que estaba enterrado en el Panteón de Los San Juanes, esta dama era muy propia para hablar y siempre traía consigo un traje negro, señal había enviudado pero eso sí lucia muy joven y era demasiado amable, solo pedía una cosa que los taxistas se quedaran esperando a que ella saliera, ninguno se oponía pues la paga iba a ser muy buena y a veces los días eran malos y convenía quedarse un rato para ganarse una buena cantidad de dinero.
Pero cual era la sorpresa de algunos de ellos que pasaban las horas y nunca salía la bella dama y cuando los trabajadores del panteón se disponían a cerrar las puertas, los incrédulos taxistas les preguntaban por la dama y ellos sorprendidos contestaban: ¿Cuál Dama?, no hay nadie ya en el panteón y ya es hora de cerrar, la cara de los taxistas era de terror, pues habían llevado a la famosa dama del panteón a su lugar de descanso.
Bien dicen que el Panteón de Los San Juanes guarda en su haber una y mil historias, ¿Cuál conoces tú?....
