La Paz, Baja California Sur, (OEM-Informex) La señora María Elena Espinoza quien ha trabajado por 20 años en el oficio de ser costurera, comentó que las ventas en este inicio del año han sido muy bajas, contando únicamente con un 30% de las ventas, siendo estos meses de enero, febrero y marzo, los más bajos en su oficio. Además manifestó que la pandemia en este 2022 ha sido un gran golpe a la economía de Baja California Sur, ante las nuevas cepas y los disparos de los altos contagios que afectan a nuestro estado.
“Tengo 20 años siendo costurera, lo que más me han pedido es lo más básico como arreglar ropa, y ajustar algunas prendas, yo no soy modista solo soy costurera y este ha sido mi oficio por 20 años, en un principio empecé a aprender porque es algo que me gusta mucho y también para mejorar la economía en la familia”.
“Es algo que ya me gustaba, pero también he estado tomando algunos cursos de corte y confección, le he puesto interés a aprender, he tomado cursos en el DIF y en la Secretaría del Trabajo, tengo las constancias de ello. Las ventas en estos tiempos han estado muy bajas, tenemos un 30% de ventas lo cual es bastante bajo, pero a veces si de plano nos vamos en blanco sin nada de trabajo, a veces no cae nada”.
“Los tiempos son muy difíciles para todos, la enfermedad es algo que asusta a las personas y limita mucho hacer las cosas, también por no contagiarnos cuando es más alta la probabilidad de los contagios por el bien de uno mismo es preferible no aceptar los trabajos que te mandan hacer, por el bien de uno y de los clientes, uno no hace nada por lo mismo, tanto la gente como uno tenemos ese contacto y es mejor evitar los contagios”.
María Elena se dedica a reparar ropa, hacer bastillas, pegar cierres, poner botones, ajustar la ropa y en síntesis arreglar la ropa que le traen por encargo, con solo un 30% de ventas realmente no subsiste de este oficio, así que decidió ir a cuidar a un señor de la tercera edad muy anciano y enfermo, para poder ayudarse en la parte económica, con el sueldo por cuidar a ese paciente, puede solventar los gastos generados en su casa y con lo que obtiene de las pocas ventas que le genera su oficio puede completar para la comida y algunas necesidades.
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“Ante la necesidad económica estoy cuidando a un señor ya muy anciano que está enfermito, digamos que me pagan bien por cuidarlo y atenderlo, estoy al pendiente de lo que necesite, y ya con lo que gane de la costura ‘acompleto’ para el diario, pero en realidad de lo que más dinero saco es de cuidar al señor, porque antes todo mundo venía a arreglar su ropa, pero ahora mucha gente no tiene ese hábito o esas costumbres de antes, y mejor se compran ropa nueva si se descompone su ropa”.
“Tengo dos hijos ya grandes, y afortunadamente todos están bien, parece que vamos saliendo de esta situación por la pandemia, debemos de tener fe y que todo va a estar bien, creo que es importante enfocarnos en lo que importa, en la salud, en el trabajo, y no estar pensando en la enfermedad. A todos nos ha perjudicado en lo económico, pero gracias a dios no se me ha muerto ningún familiar y no nos ha dado la enfermedad, tenemos que seguirnos cuidando y tratar de seguir con nuestra vida lo más normal que se pueda”.