La Paz, Baja California Sur.- La moda rápida o fast fashion no afecta a las sastrerías con gran tradición en La Paz, a pesar de que se trata de ofertas que son atractivas para los consumidores. Realizadas gracias a la producción de ropa en grandes cantidades y vendidas en almacenes a precios rebajados y aunque parece ser una buena opción, los materiales pueden durar poco antes que la prenda se deteriore y es una moda volátil.
Felipe Moraila Amador, nieto del fundador de Sastrería Moraila, fundada en 1964 por el sastre Francisco Moraila Salas está ubicada en calle Manuel Márquez de León esquina con Francisco I. Madero menciona que a lo largo del tiempo la sastrería se ha convertido en una tradición de generaciones de tal forma que los hijos y nietos de los clientes siguen llevando su ropa a reparar a la sastrería.
A sus servicios han acudido el exgobernador Marcos Covarrubias Villaseñor, quien gobernó el estado de Baja California Sur de 2011 a 2015, el presidente municipal de La Paz Alfredo Porras Domínguez, diputados federales, locales y senadores de la república y donde a pesar de ser una sastrería para caballero son las mujeres las que llevan los trajes de sus esposos a reparar o a realizar arreglos, indicó.
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La sastrería brinda el servicio de reparación de ropa, venta de telas por catálogo y hechura de trajes para caballeros. En cambio, la moda rápida “es igual de volátil que el internet” en una misma temporada puede haber diferentes prendas, de modelos y colores variados, pero no afecta a la sastrería, referente al oficio de sastre, indicó que lo aprendió en la sastrería con su padre y un curso de 6 meses en el CECATI.
“Estudié en el CECATI solo para no enterrarse una aguja en el dedo y ahí fue donde me enterré la aguja no en la sastrería”, en una temporada en 1980 antes de dedicarse casi por completo a las reparaciones su padre Jesús Moraila se implementó la hechura de uniformes de empresas como Aerocalifornia, Seguridad y Tránsito Municipal de La Paz, Cruz Roja, ya que no había tantos negocios de venta de uniformes.
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Aseguró que el negocio actualmente ya está alimentado por familiares de clientes que por tradición acuden además de personajes de la política actual. Según INEGI, son seis entidades federativas las que tiene mayor número de establecimientos de este giro y concentra el 69.3% del total nacional: Oaxaca, Yucatán, Guerrero, Puebla, México y Michoacán.