La Paz, Baja California Sur, (OEM-Informex).- Durante la temporada de lluvias en Baja California Sur, la ciudadanía acostumbra salir a mojarse, beber el agua que cae del cielo e incluso juntarla en recipientes debido a la escases de agua que se vive en la entidad, sin embargo, no es recomendable para la salud beber el agua de lluvia.
Expertos en salud indican que el agua de lluvia puede contener microorganismos y elementos pesados como aluminio, plomo, zinc, mercurio, níquel, arsénico, entre otros, por lo que no es apta para el consumo humano.
Según estudios realizados por el Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA), indican que en las grandes urbes, la industrialización y la alta densidad poblacional tienen efectos en la química de las precipitaciones pluviales, que remueven de la atmósfera particular y gases emitidos por fuentes naturales como en algunos estados del país donde se genera actividad volcánica y antropogénicas, como emisiones vehiculares e industriales.
En consecuencia, tras una intensa lluvia, estos contaminantes son depositados en la superficie terrestre, con un impacto poco favorable por la calidad del suelo, lo que indica que el problema no son las lluvias sino las condiciones atmosféricas.
Las enfermedades que podría causar el utilizar agua de lluvia son infecciones en heridas expuestas, sarpullido, enfermedades gastrointestinales, cólera, paludismo, micosis, toxoplasmosis, fiebre tifoidea, hepatitis, tétanos y en casos poco comunes leptospirosis, la cual es una enfermedad infecciosa causada por la bacteria leptospira que se puede encontrar en las heces y en la orina de animales contagiados, principalmente en ratones, entre otras.
Además, la lluvia e inundaciones pueden causar la proliferación del mosquito del dengue y para protegerse se debe utilizar repelente a diario. Para prevenir la aparición del mosquito del dengue se debe evitar dejar charcos de agua, no contar con basura o chatarra en el patio de sus hogares, proteger los recipientes donde se almacena agua y deshacerse de llantas o botellas que se encuentren a la intemperie.
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Cabe referir que, tras una lluvia intensa las autoridades indican a las y los vendedores con puestos semifijos comúnmente instalados a orilla de calle, suspendan sus ventas debido a la contaminación que se genera; también es común que tras un aguacero las personas enfermen no sólo de las vías respiratorias tras mojarse, sino porque en el líquido se encuentran bacterias.
Finalmente, expertos en salud recomiendan a la población sudcaliforniana no consumir el agua proveniente de las lluvias, sobre todo si ha sido agua recolectada del suelo ya que podrían venir acompañada de bacterias que causan enfermedades.