La Paz, Baja California Sur.-Tras la agitación vivida en las vísperas navideñas, donde las tiendas estuvieron abarrotadas de compradores en busca del regalo perfecto, y productos para la cena navideña la escena ha cambiado drásticamente.

Hoy, los establecimientos comerciales exhiben una imagen notablemente distinta: pasillos vacíos y estanterías ordenadas, marcando un contraste evidente con la bulliciosa actividad previa a la Navidad. La euforia ha cedido paso a la calma, dejando en evidencia el impacto de la celebración en el paisaje comercial.

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El fervor consumista que prevaleció en las semanas anteriores, con calles repletas de personas buscando los obsequios ideales y largas filas en cajas registradoras, ha dado paso a un panorama inusualmente tranquilo. Los comercios, que alguna vez fueron el epicentro de la actividad frenética, ahora exhiben pasillos vacíos y estanterías ordenadas, como testigos silenciosos de la vorágine que los envolvió hace tan solo unas horas.

Los empleados de las tiendas, que trabajaron arduamente para atender a la avalancha de clientes durante la temporada navideña, ahora se encuentran realizando tareas de limpieza y reposición de mercancía, mientras algunos expresan su alivio por la vuelta a la normalidad.

En el tianguis navideño ubicado en la colonia centro, la ciudad ha experimentado una inyección significativa de ingresos. Según estimaciones, la derrama económica alcanza la cifra destacada de 12 millones de pesos, provenientes tan solo de los establecimientos comerciales de esta zona.

La presidenta de la Unión de Comerciantes Madero Centro, Elisa Ruiz Bustos, se mostró satisfecha con la respuesta de la ciudadanía en los primeros días del tianguis, destacando la positiva reactivación económica.

“Con la participación de 110 módulos, podemos calcular una derrama económica estimada entre 8 y 12 millones de pesos, lo cual beneficia a comerciantes y negocios cercanos." aseguró.

Mencionó que la reorganización del Centro Histórico contribuyó a la revitalización del tianguis. Recordó que los productos más solicitados por los compradores fueron los juguetes para niños, ropa y artículos de decoración navideña.

Mientras las tiendas recobran su orden habitual, la comunidad se prepara para la llegada del nuevo año, con la esperanza de que este impulso económico persista y contribuya al bienestar general de La Paz. El impacto positivo de estas festividades resuena en la reactivación comercial, dejando un saldo favorable que promete continuar en los días venideros.

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Mientras las tiendas retoman la normalidad, la comunidad se alista para el nuevo año.