La Paz, Baja California Sur.- Bahía Magdalena, con una superficie de 114,600 hectáreas, es considerada como uno de los ecosistemas marinos más abundantes del planeta. La confluencia de corrientes cálidas y frías provenientes del sur tropical y frías del norte, respectivamente, (que provocan condiciones aptas para que se generen abundantes nutrientes), la convierten en el sitio perfecto para la reproducción y desarrollo de una gran variedad de especies.
A más de 200 kilómetros de La Paz, se localiza esta bahía que sirve como refugio natural de la ballena gris, que en los primeros meses del año llegan a reproducirse ofreciendo a los turistas un espectáculo extraordinario. Con una extensión de más de 50kilómetros, es un lugar donde los visitantes pueden disfrutar de diferentes actividades deportivas y acuáticas, además de pasear, descansar y convivir con la naturaleza. La bahía ofrece un gran espectáculo natural, en el que habitan cientos de especies marinas y aves migratorias como la ballena gris, tortugas, delfines, lobos marinos, garzas, patos y gaviotas, entre otras.
Estas misteriosas aguas albergan un secreto a voces, en el fondo marino de este paradisiaco lugar es la tumba de un submarino norteamericano, por lo que en estos días investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) realizan estudios y registros del mismo, a continuación presentamos la evidencia histórica.
Al respecto, Gilberto Manuel Ortega Avilés, egresado de la carrera de Filosofía por la Universidad Autónoma de BajaCalifornia Sur (UABCS), reveló que en el documento encontrado en el Archivo Histórico de Baja California Sur Pablo L. Martínez, en la sección de Guerra, con número 503 y en el volumen 751, se muestra la información que concierne a la notificación del encallamiento del submarino norteamericano, y las labores que se realizaron en su intento fallido de rescate.
En relación con lo anterior citó que en el documento fechado al 17 de marzo de 1920 con asunto referente al encallamiento de un submarino americano en isla Margarita, donde se menciona entre muchas cosas lo siguiente: “El día 12 de los corrientes, por la noche en el lugar denominado “Cortes”, como a 15 millas al sur de “Punta redonda”, por la parte de afuera de la isla mencionada, se varó un submarino de la Armada de los EstadosUnidos de Norteamérica ignorándose su nombre y número que tenga.Habiéndose ahogado 8 de sus tripulantes, 2 desaparecidos y 9supervivientes”.
Apuntó que en el documento se menciona como un “Destroyer” (en terminología naval, un destructor es un buque de guerra rápido y maniobrable) el cual en su intento de remolcarlo se volteó, pero sin perdidas lamentables, también se alude que el submarino se encontraba con mucho humo probablemente se encontraba con un incendio dentro de él y se temía una gran explosión, otro dato curioso es que se menciona que el submarino se encontraba entierra.
“En el oficio fechado con el 27 de marzo, se hace mención que los intentos por remolcarlos llevó a la mala fortuna que el submarino se les fuera a pique por más de 10 metros de profundidad, y al suceder esto 5 cadáveres se enterraron y dos flotaron.
Señaló que durante varios días se encontraron en la zona varios buques de la armada de Estados Unidos, los cuales se dieron a la tarea de salvar documentos de “secretos de marina”, como se menciona en el documento. Apuntando que después de varios intentos, este submarino tuvo como destino final el fondo del mar, aunque no tan profundo permitiendo que cualquiera con equipo de buceo pueda admirar el enorme submarino que después de tantos años sigue en su tumba submarina.
“Cabe destacar que al ser un vehículo militar extranjero, puede tener limitantes en cuestiones de exploración, así que es recomendable acudir con las autoridades pertinentes en caso de querer visitar el lugar. Otro evento igual de impresionante fue el del incendio del buque llamado San Lorenzo, en la bahía de La Paz, el cual aunque no ocasionó mayores percances fue un hecho impresionante y obligo a mudar las labores de carga y descarga de barcos en este puerto, cambiándolos a un lugar más alejado de la ciudad, esto se puede constatar en los documentos resguardados en el Archivo Histórico Pablo L. Martínez”, observó.
Para finalizar Ortega Avilés reflexionó en que todos estos desastres, nos hacen recordar que somos un animal terrestre desafiando al mar, y cuando le perdemos el respeto que se merece, suceden catástrofes, por lo que debemos no sólo ver al mar como un medio o un recurso para obtener un beneficio, sino como parte de nuestro hogar, el cual debemos cuidar y respetar.
Cabe destacar que la historia del submarino de Bahía Magdalena, es un secreto a voces, pero el INAH (Instituto Nacional deAntropología e Historia) se dio a la tarea de investigar el incidente, y varios investigadores, entre ellos el antropólogoAlfredo Martínez Fernández, lograron obtener las primeras impresionantes primeras imágenes del submarino, las cuales fueron publicadas junto con una extensa investigación en la revista“México Desconocido” del mes de noviembre.