Guadalupe, NL.- El invicto de América finalmente se acabó. La racha quedó en 23 juegos hasta que llegó Rayados y le puso un hasta aquí en su cancha, esa en la que las Águilas nunca han podido volar.

El duelo que pintaba para un juegazo estuvo acompañado de mucha polémica arbitral, tarjetas rojas, revisiones en el VAR y un 3-2 final que dejó muy calientes a ambas escuadras.

La corona azulcrema finalmente fue abollada. El vuelo se terminó en la Sultana.

EL JUEGO

Monterrey y América se presentaron en el Gigante de Acero para protagonizar el que estaba llamado a ser el juego de la jornada debido a las condiciones de una y otra escuadra, sus plantillas y estilos de juego desde la dirección técnica. Sin embargo, poco duró la paridad debido a la polémica arbitral que se presentó en el amanecer del duelo.

Una pelota larga fue perseguida por Avilés Hurtado. Marchesín salió al achique y cuando el colombiano estiró la pierna para intentar ganar la bola, terminó por pisar al arquero crema en una jugada que, de primera, pareció accidental, aunque después de una revisión en el VAR, el silbante Fernando Guerrero decretaría la tarjeta roja para el colombiano.

Pese a tener uno menos, La Pandilla siguió encendida y rápidamente encontraría el gol. Un centro al área crema culminó con una infracción de Emanuel Aguilera. ¡Penalti!

El hombre de seguridad desde los 11 pasos para los regios tomó la pelota. Sánchez no dudó y ejecutó cruzado para engañar a “Marche”. ¡Gol de Monterrey!

La presión de la visita encontró su resultado cuando un rebote cayó en las piernas de Edson Álvarez. El joven, con la tranquilidad de un veterano, recortó a Sánchez con frialdad, levantó la cara y fue directo a la portería. Barovero alcanzó a tocar la de gajos, pero no lo suficiente para tapar y así llegó el tanto que metió al campeón en el juego.

El empate daba justicia a lo visto hasta el momento en el terreno de juego y con él se fueron al descanso.

LA POLÉMICA

Si el primer tiempo fue un carnaval por el arbitraje, el complemento resultó de alarido. Jorge Sánchez emparejó las acciones al recibir la roja directa en una jugada igual de apretada que la de Avilés en el primer tiempo. Sin dudarlo, Guerrero le mostró el cartón rojo directo y lo mandó a las regaderas.

Minutos más tarde, la pesadilla llamada Rogelio Funes Mori empezó para los de Coapa. Inicialmente, un contragolpe en el que el argentino se llevó a Aguilera tuvo como desenlace una carga por la espalda del central crema. Falta, segunda amarilla y las Águilas se quedaban con nueve y el panorama muy cuesta arriba.

Por si no había sido suficiente polémica, Funes entró a los tumbos entre la zaga amarilla; Valdez barrió, y aunque la bola siguió de largo, el juez sancionó un contacto con la mano y la pena máxima, que aunque fue revisada en el VAR, se mantuvo como al inicio.

Nuevamente Sánchez tomó la pelota, pateó y… ¡atajada de Marchesín!

En medio de toda la locura, una tarjeta roja apareció para Nico por la manera en la que fue a pelear cuando el meta crema ya había atajado.

Con el juego ya descompuesto y las líneas rotas, La Pandilla tuvo la lucidez para liquidar de la mano de su centro delantero.

Dos chispazos de Funes Mori bastaron para definirlo. El primero al aprovechar una jugada individual de Meza, quien luego de un drible, dejó que su compañero rematara cruzado para retomar la ventaja.

La puntilla vino con un centro por derecha. El 7 albiazul controló con maestría, tiró un doble amague, y con precisión de billarista, fulminó a las Águilas.

Con amor propio, América se fue al abordaje y le puso dramatismo al cierre con un gol de Bruno Valdez.

Aunque intentó, América no tuvo tiempo de más. El invicto se acabó.