La Paz, Baja California Sur.- El robo de cuentas de Facebook, Instagram, WhatsApp y la cobranza extrajudicial, son dos de los principales ciberdelitos que se cometen en Baja California Sur.

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Elsa María Guadalupe Trejo Agúndez, agente estatal de investigación criminal adscrita a la División Cibernética de la Procuraduría General de Justicia del Estado, mencionó que el robo de cuentas se puede utilizar para diferentes fines como el fraude, la usurpación de identidad y el robo de datos.

Expresó que el castigo para los delincuentes que son sorprendidos por las autoridades varía de la gravedad del caso, si es un fraude, por ejemplo, de la cantidad de dinero que esté vinculada al delito, eso ya lo determina el juez; ahora que si la usurpación de identidad solo se usa para difamar, ahí ya no entra como delito.

“Muchas personas dicen, es que me subió (al ciberespacio), es que me está quemando, etc. Y ahí lamentablemente estamos un poco restringidos, porque solo proporcionamos la herramienta que la misma plataforma nos proporciona. Es decir, si pierde el acceso a WhatsApp o a Facebook, nosotros tenemos la herramienta para que la reporte, pero no depende de nosotros que la den de baja o que la recuperen”, precisó.

Dijo que de la pandemia para acá, otro delito que se dio mucho fue la cobranza extrajudicial, a partir de la descarga de aplicaciones de préstamo.

Expresó que el problema no es que las personas deban dinero y les cobren los despachos de cobranza extrajudicial, sino que basta con que descarguen la aplicación del préstamo para que den los permisos que ocupan los delincuentes.

“O sea, yo cuando la descargué y acepté, ahí ellos ya hacen copia y pueden compartirla con otras aplicaciones o con otras financieras que yo ni siquiera descargué”, explicó.

“Hay gente que sí pide prestado, hay gente que nada más por la curiosidad la descarga y con eso ya se hacen acreedores a la cobranza”, advirtió.

Expresó que hay personas que descargan una aplicación y piden 500 pesos prestados y por ese dinero la hostigan, también a los contactos, “les dicen cosas feas, utilizan sus fotografías, o bajan otro material más fuerte y lo empiezan a mandar a los contactos. La gente se asusta y dice, oye, pues es que no me dejan en paz”.

La recomendación, dijo, es que no deposite, pues aun cuando le deba a la aplicación y pague la van a seguir molestando.

El problema, dijo, es que aun cuando se desinstale la aplicación, los “prestamistas” generan una copia y posiblemente de esa aplicación dejan de molestar a las personas, pero igual y la fastidian de otra que ni siquiera descargó.

“Hay personas que por más que se les brinde la información, que se les prevenga de que esto puede suceder, no hacen caso. Entonces se asustan y dicen, es que me hackearon. Y no fue así, ellas permitieron que esto sucediera”.

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Puntualizó que es difícil parar este hostigamiento, pero la más segura es cambiar de número telefónico.

La entrevistada dio a conocer que este año se han abierto 37 carpetas de investigación por diversos delitos, aclarando que su función es de apoyo a la investigación, ya que las denuncias se interponen ante el Ministerio Público.

Dijo que para poner una denuncia el afectado se entrevista directamente con el Ministerio Público, que es el encargado de coordinar la investigación. Él tiene un equipo de agentes de investigación que son los que le solicitan información a la División Cibernética.