La Paz, Baja California Sur.- Dentro de pocas horas, México podría vivir el primer huracán de la temporada. Por el momento, el país afronta el ciclón tropical Uno, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

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En mayo del presente año, cuando se oficializó la temporada de lluvias y ciclones tropicales, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en coordinación con el SMN también dio a conocer que Baja California Sur sería una de las entidades federativas con mayor impacto de huracanes.

Por eso, es importante conocer y estar preparados, para saber cómo actuar de manera oportuna ante un fenómeno meteorológico de gran magnitud, como un huracán.

¿CUÁNDO SE CONSIDERA UN HURACÁN?

Primero, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) señalaron que los huracanes se forman en aguas cálidas en la superficie del mar que tengan temperaturas superiores a los 26 grados.

Un huracán, al tocar tierra, se debilita cuando ya no se cuenta con una fuente de alimentación de los océanos. No obstante, con una potencia tan fuerte, este fenómeno meteorológico ocasiona graves afectaciones debido a sus vientos y lluvias que generan; de acuerdo con la NASA y NOAA.

Al respecto, según el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) y el SMN, un ciclón tropical presenta diferentes etapas de desarrollo; la última, refiere a la evolución a huracán. Y, un ciclón tropical, en función de la velocidad de sus vientos, se clasifica en las siguientes etapas de desarrollo:

• Depresión tropical.
• Tormenta tropical.
• Huracán.

De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), un ciclón tropical con vientos menores o iguales a 62 km/h, lleva por nombre depresión tropical. Si los vientos rebasan velocidades de 63 a 117 km/h, se llaman tormenta tropical. En caso de exceder los 118 km/h, la tormenta tropical se convierte en un huracán.

La escala internacional de vientos de huracanes Saffir-Simpson determina las categorías conforme a la intensidad. Con base en ello, un huracán se clasifica en 5 categorías, de menor a mayor potencia e impacto por la intensidad en sus vientos (más de 250 km/h).

CATEGORÍAS DE HURACANES SEGÚN VIENTO Y DAÑOS

El Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, determina la intensidad de los vientos para definir las categorías:

• Categoría 1: Vientos de entre 119 y 152 km/h. El daño en tierra es leve, y el aumento de la marea que se ocasiona oscila entre los 1.21 y 1.52 metros.
• Categoría 2: Vientos de entre 154 y 177 km/h. El daño en tierra es moderado, y causa incremento de la marea de entre 1.82 y 2.43 metros.
• Categoría 3: Vientos de entre 178 y 209 km/h. El daño en tierra resulta extenso, ocasionando un aumento de la marea de entre 2.74 y 3.65 metros.
• Categoría 4: Vientos de entre 210 y 249 km/h. El daño en tierra es extremo, provoca un aumento de la marea, el cual oscila entre 2.96 y 5.48 metros.
• Categoría 5: Vientos de más de 250 km/h. El daño en tierra es totalmente catastrófico, ocasionando un aumento de la marea que llega a más de 5 metros.

Por su parte, la UNAM clasificó los daños provocados en función de las 5 categorías de huracanes. Los cuales son los siguientes:

• Categoría 1: No se presentan daños en edificios. Solamente en casas móviles y árboles. Posible inundación en la costa.
• Categoría 2: Afectaciones en puertas, ventanas y tejados. La vegetación está considerablemente dañada, al igual que las casas móviles. También, se presentan inundaciones y roturas de pequeñas presas y puentes.
• Categoría 3: Daños estructurales en viviendas y pequeños edificios. Sin embargo, no hay desplome. Casas móviles se registran destruidas. Inundaciones grandes e inclusive islas enteras totalmente inundadas.
• Categoría 4: Desplome de edificaciones pequeñas y residencias. Importantes erosiones de playas e inundaciones extensas.
• Categoría 5: Destrucción completa de tejados, casas residenciales y pequeños edificios. Inundaciones altamente graves. Evacuación total es lo más recomendable y preciso.

¿QUÉ HACER EN CASO DE UN HURACÁN?

La temporada de huracanes y ciclones tropicales culminará en el mes de noviembre. Por ello, el SMN otorga las siguientes medidas de protección:

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Prepara y ten a la mano tu mochila de emergencia. En ella, deberás contar con un botiquín de primeros auxilios, baterías, linterna de pilas, documentos oficiales guardados en bolsa de plástico, alimentos enlatados, agua purificada.

Si su vivienda se encuentra en riesgo, acudir inmediatamente al refugio o albergue más cercano. No dejes ventanas abiertas y protegerlas; ubica rutas de evacuación a manera de prevención.

Apártate de instalaciones eléctricas, árboles, postes y arroyos. Asimismo, es importante no cruzar corrientes de agua, ya que podría ser arrastrado. Mantente informado, y at los avisos e instrucciones emitidas por las autoridades pertinentes.