La Paz, Baja California Sur. – La temporada de huracanes en Baja California Sur concluyó oficialmente el pasado 30 de noviembre, dejando lluvias que, en todas localidades del estado registradas, se quedaron por debajo de la media anual histórica.
La dirección local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) publica los acumulados de 2024 y en comparación con las medias anuales, resalta un escenario de menor precipitación en gran parte del territorio sudcaliforniano.
Registros acumulados de enero a noviembre
En localidades como Guerrero Negro y Gustavo Díaz Ordaz, la precipitación acumulada anual fue de 34.4 milímetros (mm) y 33.8 mm, respectivamente, lo cual es considerablemente menor en comparación con sus medias anuales de 78.4 mm y 95.5 mm.
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Por su parte, Santa Rosalía acumuló 22.2 mm, mientras que su media anual es de 112.5 mm, mostrando una gran discrepancia que evidencia la falta de lluvias en la región.
Mulegé registró 37 mm de lluvia acumulada, frente a una media anual de 109.7 mm. En Loreto, las lluvias también fueron escasas, con un acumulado anual de solo 6.4 mm, en comparación con una media anual de 157.6 mm.
Ciudad Constitución, una de las localidades con mayor población en el estado, acumuló 16.1 mm, bastante por debajo de su media anual de 150.7 mm.
La Paz registró un acumulado anual de 9.4 mm, frente a una media anual de 172.1 mm. Otros puntos como Todos Santos y San Bartolo registraron 40 mm y 130.5 mm, respectivamente, mientras que sus medias anuales son de 176.1 mm y 353.4 mm.
En San Antonio, la precipitación acumulada anual fue de 180.6 mm, mientras que la media anual es de 450.8 mm, lo que refleja una significativa disminución en las lluvias recibidas.
En el extremo sur del estado, San José del Cabo y Cabo San Lucas presentaron acumulados anuales de 215 mm y 138.1 mm, en comparación con medias anuales de 223.7 mm y 210.5 mm, respectivamente. Aunque San José del Cabo se aproximó a su media anual, el resto del estado se mantuvo significativamente por debajo de los valores históricos.
Estos datos evidencian un patrón generalizado de lluvias insuficientes, lo cual podría tener implicaciones para la recarga de acuíferos y la disponibilidad de agua en la región durante los próximos meses.
La temporada de huracanes ha concluido sin eventos meteorológicos que aporten un respiro a las reservas hídricas de Baja California Sur, dejando a la entidad con el reto de enfrentar la sequía en el 90% de su territorio, con acumulados muy por debajo de lo esperado.
¿Qué dicen las autoridades?
Esta situación ha generado preocupación entre las autoridades municipales y estatales, quienes han implementado diversas medidas para mitigar los efectos de la sequía.
El gobierno estatal, a través de la Secretaría de Pesca, Acuacultura y Desarrollo Agropecuario (Sepada), lanzó un programa de apoyo para 33 organizaciones ganaderas, con el objetivo de mitigar los efectos de la sequía en la ganadería.
Este programa incluye un fondo revolvente para la compra de forraje, implementación de cultivos específicos y capacitación en manejo y alimentación del ganado.
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La doctora María Z. Flores, responsable de la carrera de Gestión y Ciencias del Agua de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), señaló que 2024 ha sido un año particularmente seco en gran parte del estado.
Con acumulados de lluvia muy por debajo de la media histórica, destacó la necesidad de diversificar las fuentes de abastecimiento de agua y no depender únicamente de las precipitaciones naturales.