La Paz, Baja California Sur.- El dirigente la Federación de Trabajadores al Servicio del Estado Francisco Javier Moreno Soria condenó el despido masivo de empleados de confianza en las delegaciones federales incluyendo a las Baja California Sur porque con ello se está poniendo en riesgo la viabilidad de las instituciones; acusó al presidente López Obrador de emprender estas acciones porque sus proyecciones de campaña de obtener 500 mil millones de pesos provenientes de la corrupción “no le están cuadrando”.
Este hombre está traumado, está lleno de odio y de rencor al igual que todo su gabinete; no entendemos su actuar, cómo es posible que esté despidiendo a las personas que tienen responsabilidades precisas que se requieren para el funcionamiento de la instituciones, o recortando recursos en sectores tan delicados como salud, en donde no hay medicamentos ni personal suficiente y por estas causas las cirugías se están difiriendo hasta 3 o 4 meses, cuando por su situación deben de realizarse en un plazo de tres o 4 días, expresó.
Abatir la corrupción no quiere decir correr a la gente; lo que pasa es que al presidente no le están dando los números, recalcó.
Y claro que había corrupción en los gobiernos anteriores, dijo, pero no con ese argumento se puede desmantelar a las instituciones; que se persiga y se castigue a los responsables, pero lo que no es posible es que hasta esté regalando dinero a otros países para que siembren arbolitos; eso no puede ser, agregó el líder sindical.
Descartó el riesgo de que en el futuro el presidente López Obrador caiga en la tentación de despedir personal de base, una situación que paralizaría al país: no lo permitiríamos nunca; sería el peor error del presidente, dijo y citó que a nivel nacional son 1.5 millones de sindicalizados adheridos a la FSTE:
En eso las organizaciones estamos en consenso; no vamos a permitir despidos por ningún motivo; los de confianza no tuvieron quien los defendiera y aun así los corridos sin liquidación habrán de ganar las demandas; en nuestro caso el sindicato está unido, afirmó.
En ese mismo tenor, hizo un llamado a las organizaciones sociales y gremiales para que alcen la voz con una crítica objetiva hacia las cosas malas que está haciendo este gobierno; entre otras, por el nulo crecimiento económico, la cancelación del aeropuerto de Texcoco cuyo costo vamos a terminar pagando todos los mexicanos; el retiro de los recursos a las estancias infantiles; la discrecionalidad en el uso de recursos por parte del ejecutivo y la escasa asignación al sector educativo que no pasó del 4.7 % del Producto Interno Bruto, cuando el propio presidente ha dicho que tendremos una educación como la de Canadá y otros países, en donde se le destina el 12 por ciento del PIB, concluyó.