La Paz, B.C.S. (OEM-Informex).- Dirigentes de organizaciones pesqueras del golfo de California y del Pacífico se manifestaron a favor de abrir el dorado a la pesca comercial, con las restricciones y las vedas que la autoridad determine, con base en estudios específicos, solo para pescadores locales organizados y con pertenencia a las comunidades ribereñas, pero totalmente en contra de que se permita la explotación de esta especie a los barcos del altura.
Pilar Higuera, cooperativista de la zona de Loreto y Mulegé, fue más allá, y denunció que reservar el pez dorado a favor de los que se dedican a la pesca deportiva es inconstitucional, debido a que se favorece a un solo sector, en este caso a los que se dedican al turismo; explicó que la única razón por la que se pueden negar permisos para aprovechamiento es que la especie esté en un status de peligro de extinción o colapsadas, algo que no aplica en el caso del dorado ya que esta es altamente migratoria y por tanto no tiene ningún control, y México es el único país donde se le prohíbe su explotación, salvo más allá de las 50 millas.
Por eso los barcos les ganan los amparos, dijo, y esto es porque se está creando un monopolio; a nadie se le puede dar la exclusividad de una especie; reservar el dorado a la pesca deportiva es inconstitucional, están violando el artículo 27 constitucional, recalcó.
Puntualizó que en caso de abrirse esta pesquería deberá de ser a través de cuotas de captura, con estudios de por medio, en beneficio de quienes viven de la pesca y están asentados en comunidades ribereñas, que sea con piola y sin chinchorros, es decir que sea sustentable, y por ningún motivo se permita este aprovechamiento a los barcos.
Humberto Arias, dirigente cooperativista de Bahía Magdalena, manifestó su rechazo total a la posibilidad de que se modifique el artículo 68 de la Ley General de Pesca para permitir la liberación del pez Dorado a la pesca comercial porque esto permitiría la entrada de grandes barcos a explotar esta especie, pero se manifestó en favor de que se abra a la pesca ribereña, siempre y cuando se atienda y resuelva el grave problema de la pesca furtiva originada por la falta de inspección y vigilancia, para los pescadores ribereños sería “fabuloso”, expresó
Aclaró que el saqueo de esta y otras especies no solo es de parte de la pesca furtiva sino también de la deportiva, y denunció que en los sitios donde hay más abundancia -en el golfo de Ulloa- a los ribereños no se les permite trabajar, pero sí entran grandes embarcaciones extranjeras con pescadores disfrazadas de turistas y se llevan grandes cantidades de producto,
Hizo hincapié en que el aprovechamiento de dorado sería algo “fabuloso” para el sector social, aunque alertó sobre el riesgo que esto implicaría debido a que no hay control, ni inspección ni vigilancia; es muy riesgoso, no hay autoridad, advirtió.
Sí, pero solo para ribereños: Flores
El presidente de la Federación Zona Centro y secretario de la Comisión de Vigilancia de la Confederación Mexicana de Cooperativas Pesqueras y Acuícolas, José Flores, se manifestó también en contra la posibilidad de que se permita la explotación de dorado a la pesca industrial, pero puntualizó que abrirla sería favorable para los ribereños: “Mientras que sea solo para pesca artesanal estaríamos a favor”, dijo, y anunció que el próximo lunes se reunirán las tres federaciones de cooperativas de La Paz para analizar este tema.
En entrevista por separado el dirigente pesquero de San Juanico y Las Barrancas, Florencio Aguilar Liera, informó que en esa región no hay grandes cantidades de dorado; consideró que emitir una propuesta en torno a este tema debiera ser el resultado de un análisis con todos los sectores, aunque anticipó que abrirlo a la pesca ribereña sería favorable, pero con regulaciones, vedas y, sobre todo, sin que entren barcos industriales porque se lo van a llevar todo.
No hay nada: Chicho Camacho
Vía redes sociales, el presidente de la Confederación Mexicana de Cooperativas Pesqueras y Acuícolas, Jesús “Chicho” Camacho, escribió que no hay ninguna iniciativa para liberar el dorado a la pesca comercial; que la Conapesca no tiene nada al respecto y tampoco la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados; anunció que emitirá una posición sobre este tema hasta que la conozca a detalle.
Entre tanto, la polémica por esta iniciativa que se prepara en la Cámara de Diputados integró a más personajes políticos; el diputado federal por el Partido del Trabajo, Alfredo Porras Domínguez, y toda su fracción parlamentaria signaron este miércoles un documento en donde se manifiestan en contra de que se libere el dorado a la pesca comercial: en contra también se han manifestado, públicamente, los senadores Guadalupe Saldaña del PAN y Ricardo Velázquez, de Morena, este último vía mensaje a sus seguidores de Facebook.
Una fuente consultada por este medio explicó que en caso de que aprobarse la liberación del dorado a la pesca comercial, es factible que en el respectivo reglamento se distinga entre pesca de embarcaciones menores, de altura y mediana altura, de tal manera que se pudieran aplicar restricciones para el aprovechamiento de esta especie; la Ley de Pesca vigente fue promulgada en el año 2007 sin embargo no cuenta con reglamento y por tanto sigue vigente el de la anterior que es del año 1992, es decir, el de una ley abrogada.
No es esta la primera ocasión en que se pretende liberar el dorado a la pesca comercial; en el año 2001 los entonces diputados del Partido del Trabajo Alberto Anaya, Rosa Delia Cota, Rigoberto Romero, José Narro Céspedes, Rosalía Peredo Aguilar, Jaime Cervantes Rivera, Félix Castellanos Hernández, Víctor Antonio García Dávila, Juan Carlos Regis Adame, José Manuel del Río Virgen, Aarón Irizar López, Francisco López Brito, César Reyes Roel, Jaime Barrón Fonseca y Ricardo Moreno Bastida presentaron una iniciativa para eliminar el dorado de la pesca deportiva.
La iniciativa se turnó a comisiones en diciembre de ese mismo año, pero un nunca fue dictaminada.
Entre los argumentos, los promoventes señalaron que abrir la captura del dorado a la pesca comercial representaría un enorme beneficio para los pescadores, en particular para los que no disponen de suficientes recursos.