La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- El mega apagón de la Comisión Federal de Electricidad que afectó a miles de usuarios de los municipios de Loreto, Comondú, La Paz y Los Cabos el pasado jueves se habría originado por una Alerta de Emergencia luego de que el sistema de generación se quedó con menos del 4 por ciento de reserva, según trascendió de manera extraoficial en un mensaje compartido en las redes sociales, aunque al cierre de esta edición la CFE no había emitido un comunicado oficial sobre el origen de esta falla en el suministro que afectó durante dos horas a miles de usuarios de los municipios de Los Cabos, La Paz, Comondú y Loreto.
Según el Subsecretario de Protección Civil Carlos Godínez, el corte pudo haber sido ocasionado por el aumento en la demanda de electricidad originada por la ola de calor que inició ese día, y que exigió un volumen mayor de energía para abastecer los ventiladores y los aires acondicionados.
Rebasada la capacidad de generación de las plantas, el personal de la CFE se habría visto en la necesidad de hacer cortes en varios sectores, explicó.
Aclaró que el gobierno del estado no tiene información oficial sobre las causas que dieron origen a este Mega apagón, y no descartó la posibilidad de que continúen en los próximos días, una vez que la temporada de calor ha entrado de lleno.
40 COLONIAS EN LA PAZ
Explicó que el corte de la CFE duró más de dos horas afectando de manera escalonada a 40 colonias de La Paz y a varios sectores de Cabo San Lucas, Comondú y Loreto, incluidos usuarios de la zona de Todos Santos en donde el suministro se regularizó después de 8 horas.
AUSTERIDAD, LA CAUSA
Por otra parte, el presidente de la Asociación de Empresas Hoteleras y Turísticas de la Paz (Emprothur), Agustín Olachea Noguera, responsabilizó de estas fallas al presidente Andrés Manuel López Obrador, porque aunque la CFE no informe de manera oficial sobre las causas, es prácticamente del dominio público que son a causa de los recortes en los recursos para mantenimiento que ordenó el presidente con su política de austeridad, lo que ha dejado a la CFE sin la posibilidad de atender o renovar equipos e infraestructura.
Recordó que en el año 2019 estos apagones afectaron –además de la población- a hoteles y restaurantes; puntualizó que solo unos pocos cuentan con plantas de emergencia, y alertó sobre el caos que se viene con más apagones con el inicio de la temporada de calor.
Señaló que a causa de la pandemia de Covid-19 que obligó a hoteles y restaurantes a cerrar o a operar a una minina capacidad, en el año 2020 no hubo cortes de electricidad significativos, sin embargo para este verano se espera una reactivación del sector turismo, lo que a su vez traerá una mayor demanda de electricidad, a la que se sumará la que requerirán varios hoteles que recién inician operaciones.
Finalmente Olachea Nogueda consideró que con la infraestructura disponible la CFE no podría dar abasto suficiente, por lo que urgió al gobierno federal a destinarle a la paraestatal más presupuesto y a dejar de utilizar el argumento de que todo en el pasado era corrupción y en esa lógica, no se le pueden asignar más recursos.
CABLE SUBMARINO
En entrevista por separado, el dirigente estatal de la Coparmex Gustavo Díaz, insistió en la necesidad de que el gobierno federal apoye el proyecto del cable submarino con el que se conectaría a Baja California Sur con la Red Eléctrica Nacional, una demanda que no ha sido escuchada porque el presidente está enviando todos los recursos a sus proyectos prioritarios en el sureste del país
Denunció que los apagones de la CFE inhiben y frenan la llegada de nuevas inversiones y detienen la generación de nuevos empleos; no hay negocio que pueda operar sin electricidad, expresó.
Aunque Gustavo Díaz confió en que para este año no se presenten más apagones, aceptó que se trata de un acto de fe con pocas posibilidades de que suceda, porque en los hechos no hay visos de una solución real.
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Consideró que las energías renovables que están apunto de entrar en operación en el estado como la planta de gas de Pichilingue, la Solar del Valle de Santo Domingo y la Eólica de La Paz habrán de contribuir en algo en el abasto de electricidad, aunque alertó sobre la incertidumbre que para estas inversiones representa la política energética impulsada por López Obrador; Estamos entre la espada y la pared, dijo; no hay incentivos para la iniciativa privada y tampoco la CFE resuelve el problema de fondo, concluyó.
