En recientes días las tortillerías de La Paz han recibido notificaciones por parte de sus proveedores donde informan que habrá aumentos en los costos de sus productos, mismos que entrarán en vigor para el día 14 de enero de 2019, por lo cual se realizará un ajuste de precio del kilo de tortilla, la cual podría alcanzar los $20 por kilo, todo esto de acuerdo al aumento del costo de producción.
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Rosa Guadalupe Pérez López, dueña de la tortillería Bravo, ubicada en el mercado Bravo, facilitó material probatorio donde la empresa Molinera del Valle S. A. de C. V., su principal proveedora de harina tradicional y harina integral, notifica un incremento de 4.05 % en sus productos; y también el Grupo Industrial Maseca (GIMSA) aumentó $600 pesos al costo de la tonelada de harina Maseca, siendo ambos precios vigentes a mediados del mes de enero. En el caso de Pérez López, quien usa la harina de alto rendimiento, el costo por tonelada quedará en 14,258 pesos.
Las empresas aseguran que el incremento es debido al “encarecimiento de la mayoría de los insumos y a la depreciación del peso vs el dólar que afecta los insumos que importamos y el costo del grano del maíz”; sin embargo, estos mismos factores afectan a los negocios también, puesto que tan solo la tortillería Bravo tiene un consumo que se traduce en 1,200 pesos diarios de gas y un recibo mensual que ha ido desde los seis mil pesos regulares que pagaba a los 14,900 pesos que ha pagado en los recientes meses.
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Debido a todo esto, Rosa Guadalupe menciona que es inevitable un reajuste en el precio de la tortilla, el cual debe hacerse con un amplio criterio hacia el consumidor, sin embargo recalca que éste no debe ser mayor a un peso.
