La Paz, Baja California Sur.- Queremos que nuestros hijos y sus futuras generaciones tengan un aire limpio, agua pura y un mar transparente, es su derecho y por tanto es nuestra obligación; es por nuestro presente y por un mejor futuro, señaló el gobernador Carlos Mendoza Davis, durante la ceremonia oficial con motivo del inicio formal a las restricciones contenidas en la Ley de Equilibrio Ecológico y Protección del Ambiente, con las que se busca eliminar el uso de bolsas plásticas, popotes y contenedores de poliestireno

En evento que tuvo lugar en el Parque Cuauhtémoc y al que acudieron representantes de organizaciones de la sociedad civil, funcionarios estatales, federales y municipales, el gobernador señaló que Baja California Sur será referente nacional en abandonar la cultura de plástico, y envió a la ciudadanía el reto denominado “Sin Plástico Challenge”, para adoptar buenas prácticas dirigidas a reducir el uso de los materiales antes citados y con ello el daño ecológico, sustituyéndolos por termos personales, botellas de agua reutilizables, bolsas de telas para ir a los supermercados, contenedores y refractarios

Destacó la importancia de la entrada en vigor de este ordenamiento legal, y puso como ejemplo que un popote tarde hasta 800 años en degradarse y el 1% de un unicel 32 años: iniciemos con el reto de la desplastificación, vamos a limpiar nuestros mares y vamos a librarnos de la condena del plástico, expresó.

Recordó que aún y cuando corresponde a los ayuntamientos la inspección y vigilancia y en su caso las sanciones sobre estas restricciones, es responsabilidad de todos los habitantes del estado hacer la diferencia, comenzando estás prácticas desde la casa.

A la par de la limpieza en las playas, el gobernador instruyó a sus funcionarios para que se hagan tareas de limpieza en los arroyos a fin de que la basura que hay en estos sitios no vaya a parar al mar durante las crecidas. La ley fue aprobada en julio del 2018 por la XIV legislatura, en una iniciativa presentada por la sociedad civil representada por más de 20 organizaciones, 5 restaurantes y 2 empresas de la iniciativa privada, entre otras, Ecology Proyect International (EPI), Niparajá, Cómo Vamos La Paz, BCSicletos, Costa Salvaje y Red de Observadores Ciudadanos (ROC).

El Congreso del Estado dio un plazo de 12 meses para la entrada en vigor de estas modificaciones legales en lo referente a supermercados, tiendas de autoservicio, de conveniencia, mercados y restaurantes, y de 18 meses a los dedicados a la venta al mayoreo y de menudeo de los productos señalados.

Fue aprobada por unanimidad y señala que los materiales antes citados deberán de ser sustituidos por otros provenientes de recursos renovables para su pronta biodegradación; al Gobierno del Estado le correspondió emitir los lineamientos, criterios y normas técnicas ecológicas para la implementación de esta reforma, y a los ayuntamientos los respectivos reglamentos o, en su caso, la modificación a los vigentes.

En el municipio de La Paz se modificó el Reglamento de Preservación, Equilibrio Ecológico y Protección al Medio Ambiente, estableciéndose multas de hasta 84 mil 400 pesos a quienes violen esta ley, este mismo monto aplica para el municipio de Los Cabos.

En esta primera etapa no entran en estas restricciones los que provienen de centros de comercialización de proveedores externos, por razones de conservación e inocuidad de alimentos y lo que tengan fines médicos que sean proveídos al consumidor en el punto de venta; estos materiales se prohíben hasta el año 2021.

CAMBIO DE HÁBITOS

Su entrada en vigor obligará a los ciudadanos a adoptar algunas prácticas como: llevar al supermercado su propia bolsa y que esta sea reutilizable; llevar consigo un envase para el agua, café u otra favorita, en la playa y en convivios utilizar solo platos, vasos y cubiertos lavables, entre otros.

Según cifras oficiales en el mundo el 40 por ciento de los plásticos que se utilizan son desechables; el 28 % de estos materiales los produce China y el 19 % México, Canadá y Estados Unidos; cada año se van a los océanos 13 millones de toneladas de plásticos y en este mismo periodo se usan 13 millones de barriles de petróleo para la producción de estos materiales, y cada año se usan y se desechan 5 mil millones de bolsas, de los cuales la mitad sólo se utilizan en una ocasión.