La Paz, Baja California Sur.- En las oficinas de Prospera que se encuentran en La Paz no para de llegar gente con sus papeles en mano para solicitar apoyos o simplemente preguntar por sus pagos pendientes.
Una de ellas es Cecilia, una mujer de 45 años, que se dedica a vender los dulces que ella misma elabora de manera artesanal y los ofrece en las dependencias de gobierno, mismas que visita caminando todos los días; mientras que, cuando le toca ir a las oficinas de Sedesol los jueves, aprovecha para pasar a preguntar qué ha pasado con el pago del programa Prospera, esto cuando hay poca gente porque cuando hay mucha no puede disponer de tanto tiempo y prefiere continuar su jornada.
Este jueves 20 de junio se presentó en las oficinas de esta dependencia explicando que en noviembre recibió su último pago de 3,200 pesos correspondiente al apoyo que le dan por tres de sus cinco hijos y una pequeña pensión para ella, que ya lleva 6 meses sin recibir.
En cada una de sus visitas le decían que regresara más adelante, que llevara tal documento y finalmente le dijeron que esperara hasta que fueran a entrevistarla a su domicilio, acción anunciada por Andrés Manuel López Obrador para confirmar las condiciones de las viviendas y corroborar domicilio de los beneficiados.
Hace un par de semanas que la visitaron en su domicilio las encuestadoras, quienes le pidieron datos y su credencial, sin embargo no pudieron darle razón de los pagos, por lo cual hoy acude a la oficina para saber qué va a pasar, si le van a dar los pagos pendientes acumulados o si sólo serán los pagos nuevos, en qué tarjeta se lo van a depositar y cuándo. Llega llena de preguntas después de haber pasado al banco para corroborar que no le habían hecho ningún pago por parte del programa Prospera.
Tiene razón el presidente de hacer la encuesta porque mucha gente no lo necesita, nada más aprovecha, ni tiene niños”
OPINIÓN
Cecilia, quien no quiere revelar su nombre real por seguridad, menciona que el apoyo recibido lo usaba para cosas que a veces no le alcanza para comprar, como libretas, zapatos y comida extra, por lo cual considera que es un buen apoyo para su economía y espera seguir contando con él, “porque usted sabe que el dinero siempre hace falta y nosotros tenemos 5 hijos y nosotros dos”, mencionando que tampoco están esperanzados, “esperando que nos caiga el dinero y salimos a trabajar los dos, pero mientras me sigan apoyando con mis hijos lo que sea que me den adelante”.