“El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer debe obligar a reflexionar sobre este tema, en donde la exclusión y el abuso han ido construyendo un imaginario en donde se justifica la violencia de mil maneras”, señaló el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, para luego precisar que “el gobierno debe ser el principal responsable de la transformación, de aplicar la justicia, en este caso contra quienes violenten a la mujer”.
Durante el evento alusivo a esta fecha, realizado en la explanada de Palacio de Gobierno y en donde estuvo acompañado por la titular del Instituto Sudcaliforniano de las Mujeres, Berenice Serrato, y en presencia de un importante número de mujeres y funcionarios de los tres órdenes de gobierno, Castro Cosío empeñó su compromiso de respetar los derechos de las mujeres e impulsar una cultura en donde sea desterrado este mal social.
“Hoy, la no violencia contra las mujeres debe ser una política de estado. Cuando hablamos de hacer una política transversal, no significa más que el compromiso de hombres y mujeres que amemos la libertad y el respeto a los demás, porque es necesario para vivir en fraternidad”.
Agregó que es indispensable que no se haga costumbre el hostigamiento y se justifique la forma de dominio de un género sobre otro. Que el alto a la violencia contra las mujeres y las niñas se haga forma de vida.
El mandatario sudcaliforniano consideró que son tiempos de construir procesos, de trabajos profesionales que vayan aclarando el panorama, que sirvan para escribir un porvenir distinto, en donde nos demos la mano y el gobierno ya no sirva de pantalla de posiciones políticas.
Consideró que el gobierno debe ser fuente, guía, ejemplo para recuperar la credibilidad de que “se está aquí no para fomentar simulaciones; sino para respetar, y esta administración estatal va a respetar los plenos derechos de las mujeres”, dijo.
Luego, hizo un llamado a la sociedad sudcaliforniana para que se haga pensamiento, pero también acción en la no violencia contra la mujer, porque de nada sirve el discurso si éste no va acompañado de acciones definidas y concretas que se evalúen.