La Paz, Baja California Sur.- Gracias al amor de Ivanna, una niña de 9 años, hoy sobreviven 7 jóvenes receptores de órganos.
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Debido a un video reportaje sobre la donación de un corazón, la niña Ivanna, de 9 años, le expresó a su madre Marcela Zamora “mamá, si algo me pasa un día quiero que donen mis órganos” narra la mamá de quien salvara la vida de 7 niños gracias a la donación de órganos, en febrero del año 2017.
Ivanna llega al hospital debido a un evento inesperado aneurisma roto, padecimiento que provoca muerte cerebral.
Marcela explica que fueron varios días en los que su hija permaneció en el hospital sin mejoría conmovida recuerda que “mientras pensaba qué es lo que haríamos en caso de lo que lo que tememos que llegue suceda, recordé que el deseo de mi hija era ser donadora de órganos” por lo cual con base a los deseos de su hija tomó la decisión “no fue una decisión fácil fue la decisión más difícil que he tomado en toda mi vida” afirmó.
Aseguró que no se arrepiente de haber autorizado la donación de órganos de su hija, pero explicó que ella como madre de familia vivió todas las emociones que se pueden vivir en un hospital “para mí fue el día más doloroso de mi vida, pero para otros fue el día más feliz de su vida y yo con esto me quedo” aseguró que su hija tuvo una misión en esta vida y la cumplió y ella ahora sigue adelante con su vida.
Cuando llegó el momento de firmar la autorización para la donación de órganos de Ivanna, habían pasado algunas horas de que se le había notificado la muerte cerebral de su hija. Ella tenía la creencia de que muerte cerebral era lo mismo que estar en coma; sin embargo los médicos le aclararon que de la muerte cerebral no hay retorno “es muerte al final de cuentas, pero con los órganos vivos” ahí surgió la idea de cumplir el deseo de su hija.
Expresó que ella como madre podría haber tomado la decisión sola, pero sintió la necesidad de apoyo familiar es por ello que lo platicó con sus padres, hermanos y esposo “yo necesitaba escuchar que dijeran que estaba haciendo lo correcto” y aun así con ese respaldo familiar en su interior aún existía la duda por lo cual expresó “Dios mío dame una señal de que lo que estoy haciendo es lo correcto”.
En ese momento el médico le notificó que acababa de llegar un mensaje urgente de que un niño de 9 años de 30 kilogramos de peso requería urgentemente el trasplante de hígado, es así que ella sintió que esa era la señal de confirmación que esperaba, ya que su hija tenía 9 años y pesaba 30 kilos y es que para que un órgano pueda ser trasplantado tanto el donador y el receptor de órgano deben tener compatibilidad.
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Luego de los estudios preliminares se confirmó que ambos eran compatibles por lo cual se dio paso a un protocolo urgente de donación multiorgánica en el cual se trasladaron desde la Ciudad de México 7 equipos especializados de doctores del hospital Siglo XXI y hospital Federico Gómez uno para cada órgano integrado por 7 personas y cada paciente receptor es decir 49 personas para atender la donación de 7 órganos y 2 tejidos.
Todo se llevó a cabo en el hospital Juan María de Salvatierra hace 7 años, es por ello que se hizo la promesa de que siempre sería vocera de la donación de órganos por haber vivido la situación desde el punto de vista del donador lo cual le permitió darse cuenta de la falta de información que existe en torno a la cultura de la donación de órganos y que se requiere estar haciendo campaña constantemente debido al tabú que la envuelve.
