La Paz, Baja California Sur.- En nuestros tiempos la maternidad suele ser un tema controversial y tabú en ciertos aspectos, sin embargo existen iniciativas para que las mujeres cada vez se encuentren más empoderadas y posean el conocimiento pleno sobre el embarazo y la crianza, a fin de que puedan tomar decisiones conscientes, seguras e informadas.
Las mujeres embarazadas, a través del entendimiento de qué es exactamente lo que sucede con su cuerpo a nivel físico y hormonal, pueden fortalecer el vínculo con su bebé y empezar a romper con el miedo y la ansiedad que regularmente rodea a esta situación.
Las madres que inician con la crianza responsable basada en la plena conciencia de la maternidad buscan un punto medio entre la crianza de antes, en la que se limitaba demasiado a los niños pero sin caer en la permisividad, sino dejando que el bebé sea libre; que llegue y viva en este mundo de manera armónica y respetuosa, según menciona Carla Jonguitud, quien es directora del centro de apoyo a la crianza natural “Riqui Ran”.
Algunas de las actividades que realizan en el centro con esta intención son: hacer ejercicio como yoga o natación, que preparan el cuerpo físicamente además de que ayudan en la respiración a través de la cual se controla el miedo, ansiedad y oxigena al cuerpo. Además, una vez que nace el bebé se inicia el proceso de estimulación temprana, en la que se comparte conocimiento para saber las etapas de desarrollo del bebé para potencializar su inteligencia y fortalecer el vínculo con los padres.
CAMBIO GENERACIONAL
Sin embargo, generación tras generación la crianza ha tenido cambios drásticos en las cuales pasamos de la crianza en forma de tribu donde las mujeres de alrededor se implicaban, sin embargo las mujeres han empezado a sobresalir profesionalmente y son más fuertes empoderadas mientras la maternidad empieza a quedar de lado; sin embargo, Carla Jonguitud menciona que “después de estas generaciones, como que nos empezamos a dar cuenta de que las mamás necesitamos estar con los niños por lo menos en los primeros 3 años que es la etapa más importante de la infancia”, y que a pesar de estar involucradas en la esfera profesional debe procurar darle tiempo a sus bebés y fortalecer ese vínculo.
La filosofía, “para cambiar el mundo es preciso cambiar la forma de nacer”, proveniente de un médico francés, es compartida con Carla Jonguitud, pues ella concibe tan importante la bienvenida de un bebé al mundo y de la crianza, ya que señala ahí empieza la transformación de lo que seremos; a través de una bienvenida humana, sin violencia, tranquila, “el niño se va criando con mucho amor para dar, capaz de tener relaciones interpersonales más sanas y ése es el reflejo de la crianza respetuosa”.
CONTRASTE CON LA PATERNIDAD
Finalmente, como contraste con la maternidad, también se encuentra la paternidad, la cual es promovida con la intención de que los papás se involucren más en la crianza de sus hijos, dimensionen la maternidad y compartan la experiencia junto a la mamá.
Carla Jonguitud menciona que los padres a menudo no sienten nada cuando reciben la noticia de que la mujer está embarazada debido a que físicamente no experimentan ni sienten nada, es decir, no experimentan personalmente el proceso; sin embargo, en el centro Riqui Ran se encargan de darles clases a los padres donde explican el proceso físico y hormonal al que se ven sometidas las mujeres durante el embarazo, de tal forma que entiendan el motivo del estreñimiento, la incontinencia, reflujo, agruras y tantos síntomas que pueden presentarse, “y empiezan a hacer conciencia de cómo ella está al servicio de su bebé, cómo su cuerpo está cambiando, hormonalmente; se dan cuenta de que lo que está pasando no es cualquier cosa”; de esta forma ellos dimensionan y participan de manera activa durante el embarazo, parto y crianza, lo que genera que desarrollen un vínculo más profundo con su bebé, que sean papás presentes y se compartan las responsabilidades de la crianza.