La Paz, B.C.S. (OEM-Informex).- La Bahía de La Paz se ubicó como el segundo mejor sitio del mundo para el avistamiento y nado con Tiburón Ballena, solo por debajo de Australia, y en el pasado periodo vacacional este atractivo turístico rebasó al de los viajes a la Isla Espíritu Santo, según datos aportados por prestadores de servicios.
Entre las ventajas que este destino ofrece en comparación con otros sitios es la cercanía de los lugares donde este animal se congrega, ya que se ubica prácticamente frente al puerto, en las costas del Mogote, a donde se llega en tan solo unos minutos.
Aunado a lo anterior, y contra lo que sucedía hasta hace unos 5 años cuando no existía un ordenamiento, en la actualidad la actividad está vigilada y estrictamente regulada por la SEMARNAT y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, vigilando –entre otros- que se respete la capacidad de carga del sitio, el tiempo que debe durar cada lancha en el polígono así como las condiciones y el número de embarcaciones.
El Programa Integral de Manejo de tiburón ballena cuenta con un Programa de vigilancia ambiental comunitaria, un Programa de monitoreo biológico para la especie, y un Programa de manejo para la coordinación de entradas y salidas de embarcaciones.
Sin embargo, en la temporada pico del pasado mes de diciembre cuando se registra el mayor número de viajes, surgió un nuevo problema; el abaratamiento en el costo de este servicio, debido a que no hay una tarifa obligatoria, aunque en promedio oscilaba entre mil 200 hasta mil 800 pesos por persona.
Fuentes de El Sudcaliforniano cuya identidad pidieron se resguardara, denunciaron que en las últimas semanas algunos lancheros derrumbaron la tarifa al cobrar entre 300 y 500 pesos por persona en el caso de las maquilas, es decir, precio para empresas que traen a turistas en grupo y con paquete contratado, y a los que les cobran casi 200 dólares.
Uno de los argumentos es que se trata de viajes donde se garantiza el lleno total de la lancha, es decir con 10 o más pasajeros que dejen en un solo viaje hasta 5 mil pesos.
Pese a que se trata de un asunto de mercado y de libre competencia, para algunos prestadores de servicios se trata de una práctica incorrecta porque abarata el destino y al final se convierte en una competencia desleal para quienes procuran mantener sus tarifas y con ello la calidad en el servicio.
La temporada de avistamiento inició el pasado 1 de octubre y concluye el 30 de mayo.