La Paz. Baja California Sur. Debido a los estragos causados por el huracán Lorena en las costas de BCS, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) en colaboración con la Secretaría de Marina (SEMAR), han puesto en marcha el Plan DN-III-E y el Plan Marina, respectivamente, con lo cual se busca salvaguardar la seguridad de la población de los municipios de Los Cabos, La Paz y Comondú.
Por lo qué la Sedena cuenta con 600 elementos para la aplicación del Plan DN-III-E, con personal perteneciente al 49/o. Batallón de Infantería, 3/er. Batallón de Ingenieros de Combate y 17/o. Regimiento de Caballería Motorizado.
Asimismo, cuentan con personal de las Fuerzas de Reacción, mismos que se encuentran realizando patrullajes y reconocimientos en zonas de alto riesgo.
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Mientras que la Semar cuenta con 32 elementos, 4 vehículos y 1 ambulancia disponibles en La Paz; 235 elementos, 10 vehículos y 1 ambulancia en Santa Rosalia; 292 elementos, 11 vehículos y 1 ambulancia en Los Cabos; y 104 elementos, 13 vehículos en Puerto Cortés, los cuales están llevando a cabo la operación del Plan Marina el cual consiste en auxiliar a la población civil en casos y zonas de desastre o emergencia, actuando por sí o conjuntamente con el Ejército, Fuerza Aérea y con dependencias federales, estatales, municipales, sector social y privado, con el fin de aminorar el efecto destructivo de agentes perturbadores o calamidades que se presenten en contra de la población y sus propiedades.
Cabe destacar que, a raíz de los sismos de septiembre de 1985, se creó el Sistema Nacional de Protección Civil, que invoca la participación de todas las dependencias del Gobierno, entre ellas La Secretaría de Marina-Armada de México, con el objetivo fundamental de proteger a las personas y a la sociedad ante la eventualidad de un desastre provocado por agentes naturales o humanos, a través de acciones que reduzcan o eliminen la pérdida de vidas humanas y la destrucción de bienes materiales y el daño a la naturaleza.
FASES
El Plan Marina esta organizado por fases, en las cuales se brinda el apoyo correspondiente a la población civil, siendo estas las siguientes:
Preparación: se encontrará activa de manera permanente y es mediante la cual se realizan las acciones para reducir riesgos (actualización de planes de auxilio a la población, inventarios de recursos disponibles, se identifican los refugios temporales, entre otros).
Prevención: contempla el conjunto de acciones y mecanismos tendientes a reducir riesgos, así como evitar o disminuir los efectos del impacto destructivo de los fenómenos perturbadores probables o inminentes que puedan afectar la vida y bienes de la población, la planta productiva, los servicios públicos y el medio ambiente.
Auxilio: tiene como finalidad salvaguardar la vida humana, sus bienes, la planta productiva, preservar servicios públicos y el medio ambiente. Se activa al momento que son desplegados el personal naval o unidades para proporcionar cualquier apoyo a la población afectada.
Recuperación: es el proceso orientado a la reconstrucción y mejoramiento del sistema afectado (la población y su entorno), así como a la reducción del riesgo de ocurrencia y la magnitud de los desastres futuros.
Para llevar el auxilio eficaz y oportuno a las zonas donde haya ocurrido un desastre, La Armada de México y la Secretaría de la Defensa Nacional, cuentan con personal y material integrado en unidades aéreas, marítimas y terrestres, algunas de las cuales son unidades altamente especializadas en este tipo de misiones.