Un fenómeno que se da constantemente no sólo en Comondú, sino en todo el país, es el abandono de casas habitación, ya sea viejas, en buen estado o en construcción inconclusa, sin embargo, en esta área cada ves se puede observar más el aumento de espacios que se dejan olvidados, dando un mal aspecto a la ciudad, incluso convirtiéndose en refugio de maleantes o mal vivientes.
Para poder realizar una construcción se requiere de un permiso, el cual se adquiere en obras públicas, instancia que otorga esta validez de acuerdo al tamañ o del terreno, una licencia para 300 mts cubre un periodo de 12 meses, de 301 a 1000 mts la licencia es por dos años, de los 1000mts en adelante ya son por tres años, al terminar el periodo, si no se logró concluir la obra, se tiene que volver a tramitar el permiso.
Durante la entrevista con el Ingeniero Alfonso Lizárraga Niebla habló sobre algunas razones por las cuales las personas dejan inclusas sus obras, ya que él ha manejado algunas de estas construcciones.
Muchas personas no renuevan sus permisos de construcción por diversas razones, entre ellas la falta de presupuesto, los prestamos de Infonavit son muy bajos, además la economía que se vive actualmente ha provocado el encarecimiento de los materiales y gran parte de la población recibe el sueldo mínimo, el cual no es suficiente para realizar un proyecto de construcción de una casa.
En Constitución las viviendas quedan a mitad de su elaboración porque muchos de los propietarios emigran a otras ciudades a trabajar, Comondú es un municipio de exportación de mano de obra, gran parte de sus habitantes viajan a Los Cabos, La Paz o incluso a Canadá y Estados Unidos para enviar remesas a sus familiares, o simplemente en la búsqueda de nuevas oportunidades, al llegar a su nueva ubicación muchas veces comienzan como proyecto de inversión una construcción en esta ciudad, pero se les presentan otras prioridades y abandonan este plan.
Muchas de estas casas son lujosas, con terminados elegantes y materiales costosos, pero son dejadas a su suerte en colonias alejadas del centro, donde también ha influido la falta de vialidades en buen estado, ya que muchos dueños prefieren comprar casas ya terminadas o invertir en otras ciudades donde se trasladan a vivir.
Algunos de estos lugares son ocupados por personas que consumen drogas, que no tienen hogar y tienen algunos problemas mentales o habitantes que toman posesión para después reclamarla como propia, esto pone en peligro a los vecinos, quienes nada pueden hacer al respecto.
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Sería importante dar seguimiento a estos proyectos o que existiera un programa en el que estas viviendas pasaran a otros dueños, ya que algunos también abandonan sus deudas de prestamos inmobiliarios y estos se pueden traspasar, sin duda es un área de oportunidad hasta para un nuevo negocio.
Durante administraciones pasadas se implementaron programas de pavimentación en diferentes avenidas de la ciudad y se vio como los residentes en estas áreas respondieron mejorando las fachadas de sus viviendas, lo que provoco un cambio importante en el paisaje urbano y en la plusvalía de las zonas señaladas.