La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- En general los inmuebles cercanos al centro de la ciudad son constantemente blanco para el vandalismo a través de graffitis que dañan la imagen de la ciudad, pero también de ser habitados por personas en situación de calle, tal ha sido el caso del que funcionaba como auditorio de la Sección III del Sindicato Nacional de Trabajadores al Servicio de la Educación (SNTE).
Recientemente, el Ayuntamiento de La Paz anunció que se encontraba en medio de un proceso de negociación para intercambiar el auditorio que pertenece a dicha organización, por un campo deportivo ubicado en la avenida Las Garzas, a espalda de las oficinas de la sección 3.
El auditorio, el cual se ubica en la esquina conformada por la calle Guillermo Prieto y Constitución, actualmente brinda un mal aspecto al primer cuadro de la ciudad, sin embargo, debido a su ubicación, presenta un gran potencial por el cual el Presidente Municipal Rubén Muñoz tiene el interés en reactivarlo como un espacio para el desarrollo de actividades culturales.
Sin embargo, en lo que transcurre ese proceso, el edificio poco a poco fue nuevamente ocupado por personas en situación de calle que lo habitaron, y conforme avanzaban los días, añadían cobijas, muebles, y aparecía en el lugar basura.
Además de esto, también la presencia de estas personas, empezó a generar una sensación de inseguridad para los vecinos y las personas que transitan la zona, ya que además de los usos anteriormente señalados, en dicho lugar también acudían personas a drogarse, rompiendo la protección de las puertas y ventanas para ingresar a este.
El cambio del auditorio sería para convertirlo en un espacio para el desarrollo de actividades culturales, sin embargo las negociaciones continúan
A todas luces el lugar mostraba signos de estar habitado durante todo el día, por lo que, debido a las quejas de los vecinos, elementos de seguridad, en recientes días intervinieron el lugar para desalojarlo, y de igual manera se llevaron a cabo acciones de limpieza para poder recuperar la normalidad en el inmueble.
Actualmente, se puede apreciar un auditorio limpio, aunque sin protecciones y con una gran cantidad de basura en sus afueras, misma que se encontraba en el interior, entre ellas un árbol navideño, cobijas, ropa, envoltorios de comida, escobas, calzado, mismos que desprenden un olor pestilente.