La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- México es uno de los países alrededor del mundo que más consumen agua embotellada, la venta de garrafones de agua purificada no se queda atrás, ya que en la ciudad capital los consumidores del vital liquido desean tener una opción de despacho que sea mucho más rápido y sobre todo que cumpla con los altos estándares de calidad y por supuesto que no se tenga restricción en los horarios.
Pues el punto es poder acudir a cualquier hora puesto que no sabemos en que momento nos podemos quedar sin agua, sobre todo por los cambios de clima que se han llegado a presentar en días anteriores donde el calor se ha incrementado pues parecería que el verano se ha asomado por la ventana, por ello algunas purificadoras (no muchas) le han dado esta opción a los clientes para que su adquisición sea mucho más factible y tengan la oportunidad de decidir si desean hacerlo en ventanilla mientras que el personal rellena sus garrafones o el mismo cliente solo con insertar una moneda de $10 pesos si desea el garrafón lleno o medio garrafón por $5 pesos.
Muchas de las marcas más importantes de purificadoras en México se han posicionado gracias a la publicidad y a su vez el consumidor cree tener en sus manos el mejor producto y pueden a llegar a pagar más por el agua, ya que la venta de garrafones de agua puede llegar a costar hasta $60 pesos, lo que hace variable ante la vista de cualquiera pues el precio estándar puede rondar entre los $15, $25 y $35, sin mencionar el agua alcalina que es un poco más cara pues según estudios el consumirla disminuirá el envejecimiento
SIEMPRE SE DEBE DE BUSCAR CALIDAD Y BUEN PRECIO
Los despachadores de agua purificada no son propiamente de las purificadoras, ya que recientemente una cadena de cadena comercial e tiendas de conveniencia las ha puesto en sus locales logrando gran aceptación entre el público, ya que el precio es mucho menor que las de otras marcas e incluso, los clientes se pueden ahorrar hasta un 50 por ciento de descuento
Años atrás era más común encontrarlas en muchas de las colonias populares de la ciudad de La Paz pero el vandalismo comenzó a hacer de las suyas, pues no solo desbarataban los despachadores sino que robaban el dinero acumulado en las maquinas, lo que representaba perdidas ara quienes ofrecían el servicio.
Suscríbete aquí a la edición digital de El Sudcaliforniano
También hay otro sector de la sociedad que no les gusta mucho este servicio ya que de entrada el consumidor tiene que lavar el garrafón, insertar el dinero (solo acepta monedas), esperar 90 segundos, ponerle la tapa y subirlo a su automóvil o en su defecto cargarlo hasta su casa, realmente ya es cuestión de gustos, pero se ve reflejado el ahorro al consumir este servicio.