En La Candelaria buscan el sustento en armonía con la naturaleza 

Con manos mágicas producen artesanías de barro y cosechan la caña con la que preparan piloncillo

Verónica Gonzalez | El Sudcaliforniano

  · sábado 26 de agosto de 2023

La Candelaria, un pintoresco poblado envuelto en historias, leyendas y tradiciones es habitado por 168 habitantes. Foto: Verónica González | El Sudcaliforniano

Los Cabos, Baja California Sur (OEM-Informex).- Todo un atractivo representa para la comunidad de La Candelaria, ranchería aledañas y turistas, la tradicional festividad del 2 de Febrero que festejan con actividades artístico-culturales, carrera de caballos, encuentros deportivos y el tradicional baile con la coronación de la reina.

Es el principal festejo de los 168 habitantes de la comunidad, un pequeño lugar llenos de historias, tradiciones y leyendas. Algunas familias se dedican a la artesanía y producen figuras hechas con barro, otras son productoras de caña con la que preparan el piloncillo.

Lee: Conoce el Museo Casa de Piedra en Loreto

VIDA EN LA CANDELARIA

Cuenta con un albergue escolar con alrededor de 35 años, en el cual se tiene un mural con el mensaje: “Del Rancho a la Universidad”, para conmemorar el 65 aniversario de la fundación de estos espacios que han cobijado a menores que querían estudiar pero no tenían la manera de moverse, actualmente se tiene una escuela primaria y una telesecundaria.

Los Internados Rurales de Educación Primaria actualmente llamados Albergues Escolares Rurales nacen en marzo de 1946 en las comunidades de Los Pozos, Las Calabazas y San José de Gracia, fueron atendidos por los Profesores Leonardo Gastelum Villalobos, Saharta Castro de Beltrán, y Miguel Martínez Suarez, cuentan vecinos de la zona que el albergue de la Candelaria tuvo como maestro a quien hoy es el alcalde de Los Cabos, Oscar Leggs Castro.

También forma parte de la historia el panteón local, que se cuenta es uno de los más antiguos del sur de la península de Baja California Sur, el cual continúa abierto, los habitantes dicen que desconocen la fecha de fundación de este camposanto y de La Candelaria.

“Mi abuelo murió hace 3 años de más de 97 años y él nos relataba que cuando él llegó a La Candelaria de niño, este ya tenía habitantes, pero no sabe desde cuándo”, comentó Zenaida Tamayo Avilés, encargada de la primaria.

“Desde que era niña se escuchaba el rumor de que en la comunidad existieron brujos, yo nunca vi nada, ni he sabido de alguien que se dedique a la brujería, existe la leyenda que sí había personas que se dedicaban a curar enfermos de rabia, empacho, tétanos, entre otras, pero de que vuelen en la noche de luna llena, (sonrió), no”.

Las familias religiosas cuentan con una pintoresca capilla construida hace alrededor de 40 años, promovida por el padre Mario Menghini, allí llegan personas cada 2 de febrero, Día de La Candelaria, a cumplir mandas.

“Recuerdo a un profesor que llegó al albergue, y su petición fue que le dieran el trabajo, y a vuelta de un año ya tenían su base”. Tenemos la tradición de hacer caminata desde Cabo San Lucas hasta la parroquia de La Candelaria, salimos a las 5 de la mañana y llegamos a alrededor de las 10 de la mañana,es un recorrido de 28 kilómetros.

En El Sauzal está la familia Zumaya quienes nos ofrecen café, agua, galletas y pan, y más adelante nos dan agua, es muy ameno porque vamos platicando y disfrutando de la naturaleza” dijo la profesora Zenaida.

En la zona se cultiva la caña de azúcar y la aboración de la panocha (piloncillo) tradicional, con métodos modernos en un trabajo en equipo familiar, el proceso es pasar la vara de la caña entre dos rodillos el líquido se va almacenando en un cazo de rendido y esta se deposita en moldes para empezar a cocerse hasta que espese y agarre la forma de la que compramos en la tienda.

También cultivan frutos, como guayaba, ciruelas, mangos, granadas y zapotes de los cuales hacen jaleas, conservas al igual que con la pitahaya cada temporada.

Realizan piezas de barro de manera artesanal, no es mucha la producción ya que los venden a los grupos de turistas que llegan en los tour. Otra forma de obtener ingresos de las familias de la localidad es comercializando la palma y madera de la zona que es utilizada para palapas en residencias o restaurantes.

Suscríbete aquí a la edición digital de El Sudcaliforniano

Miguel Tamayo, subdelegado de La Candelaria relató que tenía de su tatarabuelo Antonio Tamayo Castro un inventario por escrito con fecha de 1899,, él se casó con Gertrudis Zumaya quien era nativa de La Candelaria, “le decíamos papá Toño, era español, ojo verde, barba blanca, nació 1850 y murió 1947”.

“En mi casa aún conservo una barricada donde guardaban semillas, hay una pieza de bronce con fecha de 1636, y se dice que en 1600 llegó un barco pirata a La Candelaria, lugar nombrado como Migriño, y a Migriño se le llamaba boca de Migriño”, dijo Miguel Tamayo.