La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- Baja California Sur registra una demanda potencial de más de 50 mil viviendas para trabajadores derechohabientes del INFONAVIT y del FOVISSTE, sin embargo, al año se ofertan menos de 5 mil, debido a una serie de factores entre los que destaca el alto costo de la tierra y de los insumos; el cada vez más difícil acceso al crédito bancario para los desarrolladores y en los últimos tres años el encarecimiento del agua en el municipio de La Paz, que representa hasta el 5% del costo de una casa de interés social.
El presidente de la delegación Baja California Sur de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (CANADEVI) Carlos Estrada, informó que al 31 de diciembre del año 2020, el Infonavit había colocado 3005 créditos a nivel estatal, de los cuáles el 41% fue de vivienda nueva y el 59% de usada.
Explicó que a causa de la pandemia de Covid-19 la construcción de vivienda se detuvo durante dos meses y medio, y también se alargaron los tiempos para la revisión los documentos de escrituración, lo que provocó un avance en la venta de vivienda usada, en muchos de los casos, más atractiva en precios y algunas con mejor ubicación.
Pese lo anterior, aclaró que el llamado Tren de Vivienda de Baja California Sur no se detuvo y que una de las medidas que benefició a esta industria fue la medida tomada por el Infonavit anunciada a través del programa Unamos Crédito, con el que se suma la capacidad de compra de hasta cinco personas sean o no familiares para adquirir una casa.
20% COMPRA CASAS USADAS
El éxito de este programa se reflejó en que durante el año 2020 se pudieron ejercer 546 créditos con este esquema, es decir casi el 20% del total, y sobre todo, en beneficio de los trabajadores de menores ingresos.
Carlos Estrada indicó que luego de los meses más críticos de la pandemia la construcción de vivienda de interés social se he venido recuperando junto con el resto de la economía, y citó como referencia que para finales del año 2020 había 183 mil trabajadores cotizando al INFONAVIT.
Con respecto al déficit de casi 50 mil viviendas para un igual número de trabajadores que tienen derecho a un crédito de Infonavit o de Fovissste, pero que no lo pueden ejercer porque no hay una oferta en cantidad y en precio, explicó que los desarrolladores enfrentan ahora más restricciones de los bancos para acceder a créditos, que los materiales de construcción son aquí entre un 15 y un 20 por ciento más caros que en el interior del país.
NO HAY DE MENOS DE $450 MIL
Otro factor que afecta en mayor medida a La Paz en el elevado costo de los derechos de conexión de agua y drenaje y recientemente el cobro de millares de agua, partiendo de un gasto de 250 litros por habitante por día, lo que provocó que la construcción de casas de menos de 450 mil pesos prácticamente desaparecieron del mapa en la entidad, afectando a quienes ganan hasta 2.6 salarios mínimos.
El empresario consideró que para resolver este problema se tendrían que diseñar y aplicar políticas de subsidios de parte del gobierno, generando reservas territoriales, y que el parte del costo del suelo se aportación gubernamental, especialmente en el municipio de Los Cabos donde es casi imposible hacer vivienda social debido al alto costo de la tierra.
Recordó que hasta pocos años se construían en la entidad entre 3 mil y 5 mil casas de este nivel, y en la actualidad no se edifica ninguna; es imposible, dijo, no es rentable para los desarrolladores.
En relación al nuevo programa del INFONAVIT que permite a los derechohabientes solicitar su crédito para la compra de terreno o la auto construcción, Carlos Estrada señaló que es una opción más para los desarrolladores de vivienda que ahora pueden integrar en sus proyectos a una parte del fraccionamiento para la venta de lotes urbanizados; y debido a que se trata de un programa de reciente creación, aun no hay cifras oficiales sobre el éxito de esta medida.
AGUA Y ESPECULACIÓN
Citó que otro de los problemas para este sector es la especulación de tierras, en donde los propietarios no están dispuestos a vender a precios bajos en términos de la oferta y la demanda, pese al alto costo que representa la el desarrollador urbanizarlos.
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Finalmente alertó sobre el grave problema de la disponibilidad de agua potable en la ciudad de La Paz, y consideró que quien gane la elección de la presidencia municipal estará obligado a atender este asunto, con inversiones y acciones para la eficiencia en el uso y la recuperación del agua, e instando medidores en los 108 mil usuarios, ya que en la actualidad solo el 35% de éstos tienen estos aparatos, el resto paga por cuota.