Los Cabos, Baja California Sur (OEM-Informex).- Una familia que sale en busca del sustento del día, vendido paletas, nieves y esquimales de hielo, chicharrones de harina, pulseras que ellas confeccionan, aprovechan para revisar lo que en la basura tira la gente, ya que, los botes de aluminio representan un ingreso extra que pueden conseguir, además de que, con algo de suerte, encontrar alguna otra cosa de valor que pudiera ser de gran ayuda en su economía.
Sin temor a ser vistas, revisan la basura que se encuentra en los contenedores colocados sobre el andador de la marina, en el famoso puerto de Cabo San Lucas, por donde el turismo camina y que disfruta de sus vacaciones en este destino, los puede observar y llevarse una mala imagen del lugar.
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El contraste de la belleza y majestuosa zona hotelera, de las plazas comerciales que se tienen en Cabo San Lucas, con el de su gente, que se desempeña vendiendo paletas, donde recibe alrededor de $ 50 a $ 100 pesos por vender todo el producto, las pulseras si bien les va y venden dos o tres, se llevan en su bolsillo 150 pesos más, y sumando la venta de la bolsa con chicharrones que tiene un valor de 15 pesos cada una, sería un acumulado de entre los 300 a 400 pesos, aproximadamente.
Muchos de los trabajadores de las embarcaciones, depositan la basura en bolsas negras sobre los contendores, en ellos van botes de aluminio, de los que consumen los turistas que rentan el servicio para pasearse por la bahía sanluqueña, por lo que es un ingreso extra que obtienen de encontrarse con muchos de estos desechos que, tiene un valor importante una vez que los llevan a vender en las recicladoras.
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La marina de Cabo San Lucas, representa un espacio importante para los vendedores de diferentes productos, desde flores, artesanías, prendas de vestir, puros, sombreros, pareos, prestadores de servicios turísticos para la venta del paseo en embarcación marítima, entre otros.