Los Cabos, Baja California Sur. (OEM-Informex).- La compra-venta de predios que se realizan en la delegación de Cabo San Lucas, en parcelas ejidales ocasiona que los que están adquiriendo la propiedad corten y quemen arbustos, y maleza, dejando en ocasiones el fuego ardiendo y se van, sin temor a que este pueda propagarse y ocasionar una catástrofe.
Al ser entrevistado en el tema, el comandante del cuerpo de bomberos en CSL, Juan Antonio Carvajal, detalló que la quema de pastizales de las ramas que cortan para desmontar un terreno ha sido una problemática de muchos años.
Los principales servicios que atiende el cuerpo de bomberos, en donde gastan 7 mil pesos por servicio, calculó que se saca del costo total de operación anual que tienen.
“Eso quiere decir que si el cuerpo de bomberos es activado por lo menos en dos ocasiones diarias para apagar incendios de ese tipo, se habla de una erogación de 14 mil pesos promedio por día, repercutiendo en las finanzas".
Dijo ser una lástima ya que bomberos es un equipo especializado para controlar incendios en inmuebles que ponen en riesgo de alguna manera la vida y seguridad de los ciudadanos, y se gasta apagando basuritas, ramas secas porque no hay conciencia por parte de la ciudadanía, “y es una costumbre arraigada a la cual no enfrentamos todos los días”.
Es una práctica que no cesa, que se presenta cada año, principalmente cuando hay personas tratando de limpiar un predio por cualquier circunstancia, se les hace fácil prender todo lo que han cortado y en ocasiones esto se ha salido de control por parte de quienes queman esa maleza.
Puntualizó que se tiene que hacer notar que cuando un camión de bomberos llega al lugar, a tratar de controlar la quema, porque el humo afecta los hogares de los ciudadanos y reportan el incendio.
En repetidas ocasiones cuando llegan los bomberos estos reciben agresiones de quienes inician la quema de ese tipo de vegetación, hay bastante violencia por parte de las personas que inician la quema hacia el cuerpo de bomberos y en ocasiones optamos en dejar que se termine de quemar lo que incendiaron en virtud de la seguridad de los mismo bomberos
Añadió al concluir que, muchas veces los bomberos son amedrentados, por la misma gente o tan pronto como los bomberos apagan la quema de los matorrales de la basura, lo vuelven a encender y se convierte en un juego que nunca termina.
Los bomberos tratan de apagar lo que incendian y la gente vuelve de nueva cuenta a prenderlo, es una problemática bastante fuerte la que se vive en la zona de Cabo San Lucas.