La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- Las farmacias fueron de los pocos establecimientos comerciales que se mantienen abiertos en la ciudad capital durante la pandemia, y es que prácticamente el personal de estas mismas fueron guardianes de la salud, eso sí trabajando con horarios mas planificados y con todas las medidas de seguridad emitidas por la Secretaria de Salud de BCS que realizan auditorias para verificar que se esté llevando a cabo los protocolos con los clientes y empleados.
Hay entender el contexto que durante los meses pasados solo se hablaba de las consecuencias que podría acarrear el contagiarse del virus de la Covid-19 dejando a un lado a otras enfermedades también eran y son muy importantes para la población sudcaliforniana, por ello la importancia que tuvo en la sociedad de que las farmacias continuaran abiertas.
SURGEN OTRAS ENFERMEDADES DURANTE LA PANDEMIA
El no tener la vacuna también representó y sigue representando un riesgo a más de un año de la pandemia del Covid-19, ya que hasta el momento personal de las farmacias en La Paz y en BCS siguen sin ser vacunados, a pesar de estar expuestos continuamente por el trabajo de atención a clientes que realizan día con día.
Solo han sido recibido la dosis los grupos prioritarios de la población como lo son los trabajadores de la salud, personas mayores de 80 años, personas de 70 a 79 años, de 60 a 69 años, de 50 a 59 años y de 40 a 49 años. Hay que tomar en cuenta que gran parte de los trabajadores de farmacias son hombres y mujeres que se encuentran entre los 20 y los 35 años aproximadamente.
Tal es el caso de Angélica Gutiérrez gerente de una de las farmacias que abrieron en agosto del año pasado y que durante la pandemia del Covid-19 no cerraron ningún día, pero su empresa siempre han estado al pendiente de las medidas de seguridad e higiene que se llevan a cabo dentro de sus locales comerciales.
Para Angélica Gutiérrez y todo el personal farmacéutico es de suma importancia poder tener la vacuna ya que de esta forma se sentirían más seguros y seguras, de la misma forma su familia. Ya que a su vez los trabajadores de las farmacias tienen contacto con proveedores y con clientes.
Hay que recalcar que se aplica el protocolo de seguridad e higiene para cada cliente que vaya llegando como lo es el uso obligatorio de cubrebocas, gel antibacterial que hay en la entrada y mostrador, se evita las aglomeraciones, ello les permite tener seguridad y control para evitar un contagio.
Aunque son consientes la gerente y el personal que laboran en la farmacias de que se tienen que esperar a que reciban la vacuna no dejan de sentirse vulnerables, pero de la misma forma aplauden como se ha estado la llevando la vacunación en el estado de BCS, pero eso sí hacen referencia de que deberían de aplicar otro proceso al apar para todos aquellas personas que laboran en atención al cliente. En el ramo farmacéutico las auditorias son constantes y revisan las bitácoras tanto internas como externamente ya que todo tiene un porqué.
La farmacia para la cual labora Angélica Gutiérrez se enfoca en especialidades y tienen un listado de medicamentos que llevan los clientes para atender a pacientes Covid-19 y post Covid-19. Muchas otras enfermedades se han derivado a raíz de la pandemia del Cvid-19 como lo es el estrés, la presión a la par del resultado del miedo y la inseguridad por no estar vacunadas por lo que se debe de tener mucho tanto y sobre todo dar la información necesaria al cliente apegadas a las recetas que se traigan.
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De acuerdo a la Asociación Nacional de Farmacias en México hay más de 40 mil farmacias con 150 mil operadores que trabajan para este rubro y que gran parte de él continua sin ser vacunado.