Las y los sudcalifornianos que fueron atendidos durante la jornada de cirugías de manos y pies desarrollada el pasado 10 de diciembre en el Hospital General con Especialidades Juan María de Salvatierra, hoy registran mejores condiciones de bienestar al haberse controlado en algunos casos la condición patológica que les afectaba o al haberse solucionado en otros las secuelas generadas por enfermedades o accidentes.
Tal es el caso de las pacientes María Castro (de 25 años, residente de la zona del Vizcaíno en Mulegé) y Esperanza Figueroa (de 52 años, habitante de la ciudad de La Paz), quienes tras años de buscar algún procedimiento quirúrgico para tratar los problemas que limitaban la movilidad de sus extremidades, tuvieron en el cierre de 2022 la oportunidad de ser intervenidas en esta campaña que el Gobierno de Baja California Sur coordinó con la Asociación Mexicana de Cirugías de Manos, dijo el director del Hospital Salvatierra, Bogdan Arriaga Benis.
Las ciudadanas, quienes al igual que las otras 29 personas operadas durante esa jornada, acuden de manera periódica al hospital para la revisión médica y para darle seguimiento a distancia con los especialistas de la asociación que llevaron a cabo estos procedimientos, han mostrado una evolución favorable de sus respectivas afecciones y con esto han tenido la oportunidad de mejorar su calidad de vida, agregó.
En el caso de Maríase retiró una gran concentración de grasa en el pie izquierdo que le impedía caminar y aunque requerirá atenciones adicionales para restablecer su movilidad, no solo se redujo significativamente el dolor causado por esa acumulación de tejido, sino que se evitó que este siguiera creciendo. Con Esperanza se pudo corregir la artrosis que sufrió a consecuencia de una caída, detalló Arriaga Benis al mencionar que el doctor José Luis Urías ha fungido como enlace de BCS con la Asociación Mexicana de Cirugías de Manos.
Suscríbete aquí a la edición digital de El Sudcaliforniano
Aunque un primer diagnóstico en la institución de su derechohabienciaindicaba que no recuperaría la funcionalidad de su mano, con la operación que le practicaron en diciembre pasado ya logró movilidad y con esto la posibilidad de reactivarse productivamente como estilista. Al reconocer que carecía de fondos para solventar un procedimiento de este tipo en el medio privado, Esperanza ratificó que esta jornada marcó un parteaguas en su realidad, al darle la oportunidad de recuperar autonomía en su rutina cotidiana.
