Los Cabos, Baja California Sur, (OEM-Informex).- Las redes sociales se han vuelto un gran aliado para los ciudadanos, en muchas ocasiones, sobre todo para demandar posibles injusticias, tal es el caso de la reciente mujer panadera que fue aparentemente víctima de abuso de poder por parte de dos policías municipales.
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El tema fue puesto a la opinión pública tras publicarse dos videos en las redes sociales, el primero videograbado por la mujer que se dedica a vender pan, quien explicó que fue detenida por dos elementos de la policía municipal a bordo de la patrulla DST-922, mientras circulaba en un vehículo realizando su vendimia. En las imágenes se escucha como la mujer pide a los policías se identifiquen, y les reclama mencionándoles que ellos son municipales y no la pueden infraccionar, mientras uno de ellos le tira el celular, y evitar seguir siendo expuestos.
En un segundo video, el cual fue grabado por uno de los testigos, se aprecia como la mujer está siendo sometida por los dos elementos de la policía municipal, mientras un menor de edad, al parecer su hijo pide ayuda a los testigos en medio del llanto.
Los policías argumentaron luego de soltarla, que la mujer había querido quitarles un arma, sin embargo, el hecho no se aprecia en ninguno de los dos videos, lo que desató un sin número de mensajes en contra de los oficiales, pues lo que sí quedó atestiguado con las videograbaciones fue cuando uno de ellos le tiró el celular y la tenían sometida.
Horas más tarde del mismo miércoles 11 de febrero, día de los hechos, la Dirección General de Seguridad Pública, Policía Preventiva y Tránsito Municipal, informó que los dos oficiales involucrados fueron retirados de sus servicios de patrullaje y puestos a disposición para responder a la investigación que la Visitaduría Interna de la Controlaría Municipal ha iniciado por la actuación evidenciada, a fin de determinar la responsabilidad que les resulte, así como las sanciones correspondientes.
Sin embargo, el comunicado no dejó conformes a la mayoría de los usuarios que exigen despido de los elementos, mientras otros piden más capacitación y seguimiento al caso.
