Los Cabos, Baja California Sur.– La instalación de dos cementeras cerca de Cerro Colorado está generando preocupación entre 185 familias de San José del Cabo, quienes afirman que esta actividad está afectando su zona residencial turística, que no está destinada para uso industrial. A este hecho se suma la construcción de dos gasolineras en Cabo San Lucas que también ha generado inconformidad.

Además, aproximadamente 800 personas que laboran en un hospital, un centro comercial, un colegio, un hotel y un campo de golf en la cercanía también se ven perjudicadas.

Los vecinos indican que las construcciones impactan negativamente la imagen del destino turístico, además de generar problemas de movilidad y contaminación, tanto acústica como por los materiales utilizados. Los afectados consideran que todo esto es un proceso ilegal porque el proyecto fue autorizaron por no respetar el crecimiento ordenado.

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Durante la administración del XIV Ayuntamiento de Los Cabos, que recientemente terminó, los vecinos entregaron un escrito dirigido al entonces alcalde Óscar Leggs Castro y al primer regidor, Rogelio Tornero. La situación también ha sido comunicada al actual presidente municipal, Christian Agúndez Gómez, a quien le solicitan que actúe en contra de esta irregularidad que viola el Plan de Desarrollo Urbano (PDU).

Los residentes han estado luchando contra este conflicto durante aproximadamente tres meses, indicando que se permite la construcción de las cementeras a pesar de que el uso de suelo en la zona es mixto, para uso residencial o comercial, pero no para uso industrial. Esto ha afectado la plusvalía de sus propiedades, en las que han invertido significativamente.

"Nos recomendaron hablar con la nueva administración, en especial con el síndico, quien está enterado de a quién se le otorgó el cambio de uso de suelo, ya que están cometiendo un atropello", mencionó la vecina Angélica Rojas.

A pesar de que entregaron cuatro oficios al Ayuntamiento saliente, no recibieron respuesta por parte de los representantes del gobierno.

Los residentes también expresaron su preocupación por el ruido que generan los camiones que transportan el material de construcción, que operan desde las 7:00 de la mañana hasta las 10:00 de la noche.

"Lo peor es que están instalando otra cementera a solo 500 metros de distancia de la primera, a escasos 50 metros de nuestras ventanas", agregó Rojas.

El alcalde Christian Agúndez Gómez ha respondido a los vecinos, asegurando que se dará seguimiento a la situación y que no se permitirá que se incumpla con el PDU, afirmando que "nadie está por encima de la ley".

Además, otras zonas residenciales, como Las Laderas, también se ven afectadas por el asentamiento de empresas industriales, a pesar de que el PDU clasifica estas áreas como residenciales turísticas. Recientemente, se tomó otro predio cercano a las cementeras, que se está utilizando como estacionamiento, lo que genera incertidumbre entre los vecinos sobre el futuro uso del terreno.

Problemas ambientales y violaciones a la ley

En Los Cabos, la situación del medio ambiente también es preocupante. En marzo de 2023, se registró el peor incendio en la historia de la Reserva Estatal del Estero de San José del Cabo, afectando 34.5 hectáreas, más que en los últimos ocho años. Este evento desencadenó una investigación por parte de la FGR, cuyos resultados aún no se han dado a conocer.

El incendio del año pasado provocó una pérdida significativa de especies, incluyendo tortugas, aves y vegetación. En el estero habitan 399 especies de aves, incluyendo la mascarita peninsular, que está en peligro de extinción, con una población estimada de entre mil y dos mil aves adultas.

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En 2024, se han registrado cuatro incendios en el ecosistema, siendo el más devastador aquel que afectó cerca de 40 hectáreas. La costa de Los Cabos también presenta una variedad de desarrollos hoteleros que, en ocasiones, destruyen dunas para nivelar terrenos, a pesar de que la construcción sobre ellas está prohibida.