La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- Vehículos transitan por las calles de la ciudad, mientras Carlos “el lava carros” yace dormido en la banqueta, la cual sustituye una cama y utiliza un cartón como cobija, al despertar el hambre y la sed no esperan trabaja limpiando parabrisas para obtener unos cuantos pesos para comprar comida, lamentablemente pasan horas y nadie lo apoya, a lo lejos escucha a una persona que le dice a otra “ya me vacune”, mientras busca algo de comer en un contenedor de basura.

Es una de las tantas escenas que experimentan las personas en situación de calle que viven debajo de puentes, a los alrededores y en la periferia de la ciudad, donde la mayoría no tiene nombre ni apellido, según la Secretaría de Bienestar la mayoría de estas personas tiene problemas de alcoholismo, drogadicción o psicológicos, sin embargo ninguna dependencia cuenta con un registro de cuantas personas viven en esta situación, y como viven alejados de la tecnología no contarán con la aplicación de la vacuna contra Covid-19 debido a que no la podrán solicitar.

VACUNA E INDIFERENCIA

La titular de la Secretaría de Bienestar en Baja California Sur, Dhipna Yanssen Weichselbaum informó que únicamente se está aplicando la vacuna a aquellas personas que la solicitan, sin importar sus posibilidades económicas, “no hemos ido debajo de los puentes, o a las calles donde duermen, pero no porque no hayamos querido, recordemos que las vacunas son un bien limitado y tenemos más demandas que nos están exigiendo atender y no porque una persona sea más importante que otra, sino por la presión que existe de aplicar un mínimo de vacunas diarias, nos están pidiendo que lleguemos a 1 millón de vacunas diarias, si yo me pongo a buscar en los puentes, en las calles quizás me voy a encontrar con situaciones que no tienen registro, que no saben cómo se llaman, tienen otro tipo de problema y eso me requiere como Bienestar otro tipo de atención totalmente diferente”.

Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), con base en la información proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), dio a conocer los datos de pobreza en Baja California Sur, donde señalan que, entre 2016 y 2018, el porcentaje de personas con ingresos inferiores a la línea de pobreza por ingresos en Baja California Sur disminuyó 5.8 puntos porcentuales, por lo que un mayor porcentaje de la población cuenta con ingreso suficiente para adquirir la canasta alimentaria y no alimentaria.

Ninguna dependencia cuenta con un registro de cuantas personas viven en esta situación, y como viven alejados de la tecnología no contarán con la aplicación de la vacuna contra Covid-19 debido a que no la solicitarán.

UN SOLO OBJETIVO

Carlos opto por sentarse en el piso a la sombra de un árbol para relatar que de niño tenía muchos sueños, quería ser futbolista y doctor para ayudar a los demás, sin embargo al paso de los años la vida le demostró que no podría llegar a cumplir sus expectativas y se sumergió en el mundo del alcohol y cuando el ya no fue suficiente empezó con el consumo de drogas, “al ver mi realidad lo único que puedo lograr al día es comprar resistol de ese amarillo, del bueno, con el dinero que me dan por limpiar carros, yo no tengo casa, no tengo familia, no tengo nada, yo no sé qué es eso de la vacuna y del virus, yo como de la basura y duermo en la calle y nada tengo”, mencionó mientras su mirada se perdía.

Tan solo en la capital del estado hay decenas de personas en la misma situación que Carlos, sin embargo el decidió trabajar para poder obtener lo suyo, además de limpiar vehículos ofrece en los hogares barrer la calle o limpiar sus patios, pero al caer la noche no debe de traer dinero en sus bolsillos ya que sus compañeros se lo quitan, “si me duermo con dinero amanezco sin nada, dormir en la calle es tierra de nadie, aquí hay de dos o sobrevives o te matan por comida, nosotros no robamos, trabajamos”.

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Como mensaje a la ciudadanía, las personas en situación de calle lo único que piden son oportunidades, no ser enjuiciados por culpa de los estereotipos, ya que sólo buscan dejar oportunidades para dejar el lado obscuro en el que se encuentran sumergidos. Solicitan ayuda y apoyo para poder comer, beber y recibir servicios de salud, como la vacuna del Covid-19.