La iglesia católica inició una colecta de víveres con los que se elaborarán despensas para entregarlas a las familias necesitadas de la capital y para ello, abrió centros de acopio en los que se cuenta con la participación de ciudadanos generosos e interesados en el bienestar del prójimo.
Los donativos pueden entregarse de las 9 de la mañana a la una de la tarde en las Parroquias de La Sagrada Familia, Corazón de María, Rectoría de Nuestra Señora del Auxilio, San Martin de Porres, Rectoría de San Juan de Los Lagos, de la Medalla Milagrosa y Santa María Goretti.
Estamos viviendo una etapa de contingencia sanitaria, tiempos difíciles para nosotros y nuestras familias, el panorama parece ser desolador, sin embargo, no nos podemos olvidar de las personas que tienen menos que nosotros, los más pobres, los que no tienen un sueldo fijo, en este tiempo de incertidumbre, sabemos que los que estaban mal estarán peor, así que simplemente tratemos de realizar una buena acción por aquellos que en verdad necesitan de nuestra ayuda, démosle un poco de lo que tenemos.
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Como cristianos no podemos ni debemos de olvidarnos de los que nos necesitan. Tratemos de compartir algo de nuestra mesa, demos un poco de lo mucho que tenemos y en ocasiones no sabemos valorar, tratemos de ser mejores personas con nuestras acciones, tratando de ayudar al que más lo necesita.
Estas despensas que se estarán armando, al recibir su apoyo, serán llevadas a los más necesitados. Para que cuenten con el alimento que es vital para poder sobrevivir a esta contingencia, para poderles dar un poco de tranquilidad, de paz y hasta de felicidad, en sus hogares.
Como dirían las palabras sabias de Santiago 2, 14-26, “Id en paz calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, de que aprovechara, la fe si no tiene obras, es muerta en sí misma. Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios”.
Haciendo un llamado a la ciudadanía paceña, quien se ha caracterizado por ayudar a los que más lo necesitan, quienes en tiempos difíciles tratan siempre de dar la mano a los que lo necesitan, los exhortamos a participar en esta acción conjunta, donde no solo estaremos ayudando a quienes lo necesiten, sino que además realizaremos una buena obra, para que nos vaya mejor a nosotros y nuestras familias.
El hecho de dar algo a los demás, siempre será un buen signo de abundancia, si tu das algo a quienes lo necesitan, ese algo se te regresara, y te ira bien, los actos buenos, de bondad, siempre serán recompensados.
Pongamos un poco de nuestro granito de arena, el cual será usado para una buena causa, para que aquellos que no tienen comida en sus hogares, puedan comer y tener algo que compartir en sus mesas.
En este tiempo de crisis, de caos, de incertidumbre, no solo tenemos que tener fe en que todo esto terminara, también tenemos que dar un poco de nosotros mismos, este acto de bondad, de humildad, de generosidad será de gran ayuda para quienes lo necesiten.
No esperemos a que esto termine en una verdadera tragedia, tenemos que unirnos como pueblo, tener empatía y brindar esa ayuda que algunas familias necesitan en estos momentos, ayudemos compartiendo algo de nuestra mesa, todo lo bueno es recompensado, así que tengamos fe, pero también realicemos actos que nos ayuden a ser mejores personas, mejores seres humanos, ayudando a quienes nos necesitan n estos momentos.
