La Paz, Baja California Sur.- Eugenia Arce Geraldo, representante de la cooperativa de pesca "Los Guillén," describe la realidad que viven los pescadores locales, y narra que "la vida en el mar, para un pescador, no es sencilla", al señalar que la escasez de especies afecta la economía de quienes dependen de la pesca comercial.
Arce Geraldo explica que, además de la baja disponibilidad de peces, los costos de mantener las embarcaciones son elevados, por lo cual, ocupan diversificar sus ingresos.
"A nosotros nos llega a costar, cuando necesitamos hacer una reposición de un motor fuera de borda, unos 250 mil pesos como aporte personal".
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La cooperativa ha recurrido a actividades como la pesca deportiva y el avistamiento de ballena gris para complementar sus ingresos y que el turismo permita mitigar las pérdidas de la pesca comercial.
"Nosotros, como pescadores que también nos dedicamos a la pesca deportiva, consideramos la renta de nuestra embarcación, incluyendo comidas y hospedaje. También haremos uso de este motor para el avistamiento de ballena gris, que ya se acerca la temporada en Puerto Chale".
Desde el inicio de la administración del gobernador Víctor Manuel Castro Cosío en 2021, la Secretaría de Pesca, Acuacultura y Desarrollo Agropecuario (SEPADA) ha entregado 80 motores fuera de borda a cooperativas pesqueras de Baja California Sur.
Este miércoles, 15 unidades adicionales se suman a los apoyos en un esfuerzo por aliviar las dificultades que enfrenta el sector pesquero, que depende cada vez más de actividades complementarias para sostenerse.
¿Cuál es panorana para la pesca comercial?
La cooperativa "Los Guillén" continuará trabajando este fin de semana con la temporada de pesca deportiva, la cual se detendrá en diciembre para luego dar paso al avistamiento de ballena gris en enero.
Después, en marzo, retoman la pesca comercial, que, según Arce Geraldo, es cada vez más complicada debido a la disminución de especies en la región.
"Ya no hay tantas especies como antes; es muy poco y ha escaseado bastante," declara, refiriéndose a la “decadencia” de esta actividad que alguna vez fue rentable.
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Para muchos pescadores locales, el futuro en el mar es incierto. A pesar de las entregas de motores y otros apoyos de SEPADA, el sector pesquero enfrenta grandes desafíos ante la sobreexplotación y la falta de recursos en las aguas de Baja California Sur.