La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- El dirigente estatal de la COPARMEX Gustavo Díaz Tronco hizo un llamado al gobierno federal para que atienda la problemática que se presenta el transporte marítimo, en donde la capacidad de los Ferries que cubren las rutas a Mazatlán y Topolobampo ha quedado rebasada, originando tiempos de espera de hasta más de 20 días para obtener un espacio en alguno de los buques, con el costo que esto representa y que finalmente se traslada a los consumidores finales.
Recordó que aun antes de esta crisis en el transporte marítimo Baja California Sur tenía el costo más alto de la canasta básica, de tal manera que si el problema no se soluciona los aumentos podrían ser mayores, disparando aún más el índice de la inflación a nivel local.
Hizo énfasis en que tratándose de grandes inversiones, ni el gobierno local ni la Administración Portuaria Integral de Baja California Sur (API-BCS) tienen capacidad para construir una nueva infraestructura, de tal modo que se requiere del apoyo del gobierno federal; ya sea para una ampliación del puerto o uno nuevo en un sitio distinto a Pichilingue.
En ese mismo tenor, explicó que el crecimiento de la economía de esta entidad y el acelerado aumento de la población están generando y van a seguir demandando una gran cantidad de alimentos y de insumos, que en su mayor parte proceden del macizo continental y llegan vía marítima.
Según transportistas consultados por El Sudcaliforniano, en los últimos meses los transbordadores trabajan prácticamente al 100% de su capacidad y con la reciente descompostura de uno de los buques la situación se agravó porque algunos camiones tienen que esperar hasta 20 días en espera de un boleto.
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Denunciaron además prácticas abusivas y monopólicas de una naviera que da preferencia a las grandes cadenas comerciales y deja en tierra a los pequeños transportistas, aun y cuando traigan productos perecederos y hayan reservado con días de anticipación; derivado de lo anterior, hace apenas unos días, un grupo de choferes amenazó con bloquear el puerto de Mazatlán.
Otra arista de este problema es el costo, ya que un tráiler procedente de Guadalajara con destino a Los Cabos cobra en promedio 65 mil pesos por el flete, y tan solo en el boleto del barco debe pagar más de 20 mil pesos y otra cifra similar de regreso, además de los gastos del chofer, pensión, combustibles y lubricantes.
Eso, enviando por el barco solo la plataforma; en caso de que se suba con tractor el costo de incrementa.