La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- El obispo de la Paz Miguel Angel Alba Díazse manifestó en contra de la iniciativa de ley que propuso la diputada de la Cuarta Transformación y militante del Partido del Trabajo Mercedes Maciel, con la que se pretende penalizar a quienes promuevan, obliguen o ejecuten a una o más personas a la realización de tratamientos o terapias de conversión para corregir la orientación sexual o la identidad de género.
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Señaló que esta iniciativa es “un distractor estúpido”, porque las principales problemáticas en este momento y por las que deberían de estar preocupados los diputados son la salud, el empleo y muchas cosas más, y lo único que ha caracterizado a este congreso han sido sus pleitos por el dinero y por los puestos directivos.
Prohibir por prohibir me parece absolutamente injusto; va contra la libertad de las personas, expresó el máximo representante de la iglesia católica en el estado, al tiempo que recordó que hace apenas unos días el presidente López Obrador afirmó que México es un país libre en donde está prohibido prohibir; si esa diputada es del PT y está aliada con Morena, que sea congruente, pidió.
Pienso no tanto en niños y adolescentes en donde no se presenta tanto esta problemática; pienso sobre todo jóvenes y adultos; Si alguien no está conforme con sus preferencias y requiere ayuda, porqué se le debería de prohibir, cuestionó.
Si tengo adicción al cigarro, porqué me van a prohibir que vaya a que me ayuden para dejarlo; Tampoco que los obliguen; que les hagan una propuesta y a lo mejor si no quieren pues no vayan, pero prohibirlas y sancionarlos, eso no; sobre todo si se trata de una decisión libre, porque espontáneamente la quieren o porque asumen una petición o un consejo de los padres y lo aceptan, agregó.
No obstante, consideró que lo que sí habría que regular son las terapias, debido a que en ocasiones pueden ser muy agresivas y dañar física, moral o emocionalmente a la persona tal y como sucede con los centros de adicciones; en todo caso, estas terapias tendrían que estar certificadas: Eso sí tendría que regularizarse y sancionarse, enfatizó.
Finalmente el obispo Miguel Angel Alba dijo no tener conocimientos de clínicas o terapeutas en el estado que atiendan este tipo de problemas e, aunque sí de algunos psicólogos que trabajan en estos temas, y que han recibido a algunos esposos y esposas que por esta condición de preferencia sexual consideran pueden causar un daño a su familia.