La Paz, Baja California Sur. Un proyecto de ley que se cocina en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión para liberar el Pez Dorado a la pesca comercial alertó a prestadores de servicios turísticos de Los Cabos ante el riesgo de que esta propuesta se concrete, afectando en mayor medida al sur del estado, en donde esta actividad es desde hace décadas el motor de la economía y el principal atractivo para visitantes nacionales a internacionales.
La especie, -que junto con otras 8- está reservada hasta ahora a la pesca deportiva, pretende ser aprovechada de manera comercial modificando para ello el artículo 68 de la Ley General de Pesca, en beneficio de miles de pescadores ribereños, tal y como ya sucede en varios países de América, según recientes declaraciones del diputado por Morena y presidente de la Comisión de Pesca, Maximiliano Ruiz Arias.
Sobre esta iniciativa, el empresario cabeño y presidente de la Fundación para la Preservación de los Picudos Enrique Fernández del Castillo, manifestó su rechazo y anunció que llegarán hasta las últimas consecuencias para evitarlo, con acciones radicales que podrían llegar a la quema de barcos de pesca comercial.
Estamos enfurecidos, dijo, no podemos permitir que por intereses de una mafia pesquera maten a Los Cabos, porque detrás de esta propuesta que supuestamente busca beneficiar a los pescadores ribereños, lo que en realidad existe es un grupo de no más de tres empresarios de pesca comercial de Mazatlán, que han sido favorecidos desde hace más de una década, incluso con subsidios de 5 mil millones por año, acusó.
En ese mismo tenor, anunció que buscarán a los diputados de MORENA para denunciar que esta iniciativa es “una estupidez”, y para “quitarles la máscara y se sepa quién está detrás y cuánto le dieron de moches”.
Graves consecuencias: Cliserio Mercado
En entrevista por separado, el coordinador para México de los torneos Bisbee's desde hace 29 años y cofundador de la Copa Gobernador Cliserio Mercado, alertó sobre las consecuencias de aprobar esta iniciativa por la “afectación tremenda” para el estado, particularmente para el municipio de Los Cabos.
Destacó que la pesca deportiva fue el detonar de todo lo que se ve ahora, desde 1950 cuando inició en Las Cruces, Punta Pescadero y Rancho Buenavista hasta llegar a los hoteles Palmilla y el Chileno y finalmente a Cabo San Lucas, con un efecto que hoy se refleja en tres marinas de primer nivel, dos aeropuertos internacionales, 12 campos de golf y 18 mil cuartos de hotel.
Denunció que aun y siendo una especie reservada a la pesca deportiva, la pesquería de Dorado se ha derrumbado en los últimos 15 años a causa de la captura ilegal y la incursión de grandes embarcaciones de Sonora, Sinaloa, y Baja California en el Golfo de California; recordó que hace 15 años se sacaban dorados de 95 libras, luego bajó a 65 y en la actualidad se han entregado premios de hasta 80 mil dólares en torneos donde se han capturado dorados de solo 14.4 libras: si lo liberan, qué van a dejar, cuestionó.
Explicó que tan solo en Los Cabos la pesca deportiva genera un impacto de 24 mil empleos directos y tan solo dos torneros una derrama de 12 millones de dólares en una semana y media, de un total de 20 torneos al año de los cuales 8 son de nivel internacional y 4 de éstos rebasan el millón de dólares en premios, sin dejar de mencionar las divisas de 120 mil pescadores al año con un promedio de gasto de 2500 dólares cada uno.