La Paz, Baja California Sur.- El proyecto de ampliación de la Exportadora de Sal de Guerrero Negro (ESSA) a los salitrales de San Ignacio será retomado y en su caso presentado ante el Consejo de Administración, según dio a conocer Antonio Avilés Rocha, director de esta paraestatal.
La idea ya fue expuesta por el propio funcionario al presidente Andrés Manuel López Obrador, para retomar el proyecto que se frustró en el año 2000 por presiones de las ONG ambientalistas que orillaron al entonces presidente Ernesto Zedillo a cancelarlo con el argumento de que representaría una modificación al paisaje.
Avilés Rocha recalcó que por lo pronto se trata de una propuesta en la que se analiza la pertinencia de evaluar nuevamente este proyecto, atendiendo a las condiciones actuales del mercado.
UTILIDADES
Recordó que en caso de concretarse la ESSA aumentaría sus utilidades hasta en un 30 por ciento, ya que construiría un muelle de 170 metros y un sistema de bandas en las cual se cargarían directamente los barcos que llevan la sal a su destino final, y no como en la actualidad que deben ser descargados en isla de Cedros, con el costo que representa esta doble maniobra.
En lugar de Cedros estos barcos, con capacidad de hasta 100 mil toneladas, se cargarían en este nuevo muelle y ya no habría necesidad de usar las barcazas de 10 mil toneladas que actualmente acarrean el producto desde El Chaparrito hasta la isla.
Pese a que en su momento la actividad salinera fue objeto de duras críticas por parte de ambientalistas, en la actualidad ha quedado demostrado que opera con respeto absoluto a la naturaleza y convive con especies como la ballena gris y más de 200 tipos de aves, concluyó Avilés Rocha.