La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- A 5 días de que se colocaran las banderas rojinegras en la minera El Boleo de Santa Rosalía, sindicato y empresa no logran llegar a un acuerdo en los rubros de bono de utilidades y aumento al salario, y según fuentes de El Sudcaliforniano, la compañía estaría solicitando a la Junta de Conciliación y Arbitraje se declare inexistente la huelga, una medida que según el delegado en Baja California Sur del Comité Nacional del Sindicato Minero Tomás Hernández no procedería, debido a que se cumplieron todos requisitos que marca la ley.
Según el líder sindical, será este lunes 11 de julio cuando se dé a conocer la legalidad o en su caso la inexistencia de la huelga.
Entre tanto, Tomás Hernández negó que el movimiento se encuentre radicalizado o el sindicato rebasado; al contrario, el movimiento está firme, la base unida y seguimos adelante, dijo, al tiempo que agradeció las muestras de apoyos de la gente de Santa Rosalía y del resto del estado, así como el de otras organizaciones sindicales.
En ese mismo tenor, negó que haya una campaña de odio hacia los empresarios o los directivos de la compañía, aunque aceptó que dentro del pliego petitorio se incluye la demanda de destitución de 4 supervisores a los que los obreros acusan de malos tratos; pidió a la comunidad su comprensión por este paro laboral, pero recalcó que se trata de un movimiento justo y legal.
Con todo y lo anterior, no descartó que -como siempre sucede en este tipo de movimientos-, dijo, haya intereses ajenos que pretendan afectar al sindicato y los derechos de los trabajadores.
Mientras la empresa sigue paralizada, ante las muestras de respaldo también se han sumado recientes rechazos de una parte de la población local de Mulegé que muestra preocupación
Hizo hincapié en que hay una gran inconformidad de los trabajadores por maltrato y el trato poco digno hacia los obreros en la supervisión de coreanos “y de algunos mexicanos que se han contagiado con esa forma de actuar”.
Recordó que este y otros puntos se abordaron en una reunión que tuvo lugar el pasado viernes entre representantes sindicales y patrones, en donde el único acuerdo fue que las peticiones “se iban a revisar”.
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Y mientras la empresa sigue paralizada, a las muestras de respaldo se han sumado recientes rechazos de una parte de la población local de Mulegé, que ven con preocupación el desarrollo de este movimiento, debido a los graves efectos que genera en la economía local
Hay también un marcado nerviosismo e incertidumbre debido a que hasta hora las autoridades locales han permanecido totalmente al margen, porque aun y cuando no es competencia municipal ni estatal, en el pasado reciente tanto alcaldes como gobernador y legisladores locales y federales han intervenido para coadyuvar en la solución de problemas de la empresa.