La Paz, Baja California Sur.- Prestadores de Servicios Turísticos de los Santuarios Balleneros de Baja California Sur registran una notable disminución en la llegada de cetáceos, en Laguna Ojo de Liebre, con un conteo de 830 organismos contra mil 500 en la misma fecha pero del 2018, y en San Ignacio con solo 220, un 10 por ciento menos que en años anteriores.
Fuentes de El Sudcaliforniano informaron que se trata de una cuestión natural y cíclica originada por el fenómeno de El Niño, que entre otros efectos provoca una elevación en la temperatura del mar, este efecto a su vez, hace que las ballenas se queden más al norte, en las costas de Baja California y California, en donde históricamente las aguas son más frías.
Los registros de la llegada de ballenas se realizan desde hace 23 años, tiempo en el que El Niño ha causado varias veces este tipo de altibajos: la temporada más alta fue en el año 2016 con mil 992 ejemplares en laguna Ojo de Liebre, en la Reserva de la Biosfera de Vizcaíno.
Aun así, la llegada de visitantes no se ha interrumpido; todos los días llegan turistas para hacer los paseos de avistamiento, destacando los grupos de norteamericanos que arriban en caravana así como autobuses procedentes del interior del país.
El conteo más reciente en Ojo de Liebre se llevó a cabo este lunes 12 de febrero y será la próxima semana cuando se realice en laguna San Ignacio.