La Paz, Baja California Sur.- El panorama del agua en esta entidad es crítico, por lo que se necesitan diferentes alternativas para poder abastecer de forma equilibrada a la población y los sectores productivos como el turismo y la agricultura.

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La doctora María Z. Flores, responsable de la carrera de Gestión y Ciencias del Agua de la Universidad Autónoma de Baja California Sur, expresó que 2024 ha sido un año particularmente seco en la mayor parte del territorio, pues solamente ha llovido en la zona sur del estado.

San José del Cabo está cerca de su promedio anual de precipitaciones pluviales con 215 milímetros (mm), mientras que en La Paz y Loreto, las lluvias acumuladas apenas alcanzan los 9.4 mm y 6.4 mm, respectivamente.

En la zona serrana de La Paz las precipitaciones son más abundantes, pero lejos de sus niveles promedio, pues en San Antonio, Todos Santos y San Bartolo, las lluvias acumuladas alcanzan los 178 mm, 40 mm y 130.5 mm cuando sus promedios anuales son de 442 mm, 176.5 mm y 353.4 mm, respectivamente, de acuerdo con los reportes de la Comisión Nacional del Agua.

La especialista dijo que este escenario puede atribuirse a la baja incidencia de ciclones tropicales y la poca agua que han dejado, la cual se ha concentrado en la parte sur de la península.

Expresó que ante la situación de sequía que se está viviendo, la sobreexplotación de la mayor parte de los 39 acuíferos del estado y los efectos del cambio climático, que llegó para quedarse, las autoridades y la sociedad en general deben prepararse con estrategias para poder contar con agua.

“Creo que esto nos deja como enseñanza que no podemos depender solamente del agua de lluvia que recibimos, a partir del ciclo natural, creo que tenemos que aprender como sociedad a diversificar la oferta de este recurso”, expresó.

Mencionó que no se puede descartar la desalinización de agua de mar, aun con los riesgos que implica la salmuera y los costos energéticos y de mantenimiento de las plantas, pero no es la única alternativa, ya que también se puede recurrir a la retención de agua con represos para la recarga de los acuíferos y la potabilización de agua de presas.

Abundó que a la par de la producción de más agua se debe trabajar en la eliminación de fugas, ya que actualmente existe una gran perdida del recurso por el estado deficiente de las redes de distribución.

Expresó que desde el sector académico siempre se sugiere aplicar diferentes estrategias de forma simultánea y constante, para lo cual se deben asignar presupuestos importantes por parte de todos los niveles de gobierno.

Dijo que para todo desarrollo se requieren el agua y la energía, pero sobre todo la primera, porque si no se tiene este recurso de forma suficiente, el desarrollo estará limitado y comprometido.

Puntualizó que otro punto que se debe replantear en Baja California Sur es la cantidad de cuartos de hotel que se pueden construir de manera sustentable, pues mientras millones de turistas cada año tienen acceso a agua y energía en abundancia en lugares como Cabo San Lucas, a unos cuantos kilómetros hay gente que no tiene ni siquiera red de distribución.

Mencionó que toca a los tomadores de decisiones la reflexión y la planeación para que se tenga un desarrollo sustentable y equilibrado, con infraestructura que permita generar más agua, sistemas de monitoreo y medición para evitar el desperdicio, la gestión de mejores redes de distribución, y la consolidación de leyes y reglamentos que aseguren un uso racional del recurso.

Expresó que no hay estudios precisos sobre el gasto de agua que se hace en los hoteles del estado, pero una manera de evitar el despilfarro del recurso es el establecimiento de límites de uso, a través de sistemas sanitarios ahorradores.

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“Creo que ya no podemos permitir la licencia de seguir aplicando las mismas estrategias de hace 10 o 15 años porque el panorama hídrico ya está completamente rebasado, está moribundo, entonces creo que ya se necesitan otro tipo de estrategias, más firmes, claras y contundentes”, expresó.

Dijo que algunos hoteles ya cuentan con plantas de tratamiento de aguas residuales que usan para el riesgo de sus jardines y campos de golf, pero sería fabuloso que hubiera y se aplicara una normatividad que obligara a todos a limpiar y reciaños,el agua.

En cuanto a la población, mencionó que también pueden contribuir con la acumulación de agua de lluvia y el uso racional del vital líquido.